Personal al servicio de la clínica popular “Dr. Emigdio Cañizales Guedez” denunciaron ante la Inspectoría de Trabajo Región Miranda “este abuso despiadado del director Nelson Araujo”
Treinta y ocho trabajadores de la clínica popular Lebrun “Dr. Emigdio Cañizalez” ubicada en Sede Norte, solicitaron un amparo en la Inspectoría del Trabajo Región Miranda, ante el despido masivo, denunció el vocero del grupo enfermero Alexander González.
Manifestó González la grave situación laboral que están padeciendo esta masa de trabajadores, desde que el director de este centro de salud Nelson Araujo los despidió de manera despiadada injustificadamente e incluso a trabajadores que se encontraban de reposos médico, como es el caso de él mismo que había sido operado con un diagnóstico de células malignas en su organismo.
En vista que no habían depositado su salario correspondiente al 15 de diciembre 2012, llamo a la clínica para preguntar porqúe no le habían depositado la quincena, siendo informado por la enfermera jefe Omaira Medina que él estaba despedido, comprobando que además de su salario también le habían suspendido los demás beneficios.
Del mismo modo denuncia Jennis Suárez enfermera I, quien también se encuentra de reposo medico por complicaciones quirúrgicas, que fue despedida y suspendido su salario y demás beneficios desde el mes de noviembre del año pasado.
Expresó asimismo que Omaira Medina, “quien se da el lujo de despedir a los enfermeros y enfermeras, cobra tres sueldos, jubilación por el IVSS, pensión de vejes y de remate contratada por el Ministerio del Poder Popular para la Salud como jefa de enfermería de esta clínica, situación ésta que si es ilegal”.
Le suspendieron los sueldos
Afirmaron que a pasar de estar protegidas por 3 inamovilidad especiales contemplada en los artículo 94, 335 de la Ley Orgánica del Trabajo, las Trabajadoras y los Trabajadores (LOTTT) y por el decreto presidencial, el director de la clínica violenta todas estas leyes y despide a mansalva.
Por otro lado el trabajador Randy Mogollón quien es camillero manifestó a pesar de que de estar amparado por fuero paternal también fue despedido sin contemplación alguna.
El trabajador Miguel Ángel Farías quien es aseador de la clínica, aunque no pudo declarar porque es discapacitado ya que tiene impedimento auditivo y del lenguaje, uno de sus compañeros declaro por él, informando que tiene 72 años de edad, fue despedido injustificadamente por el director sin tomar en cuenta la necesidad de este humilde señor.
El trabajador José Garvan, señala que en el mes de diciembre del año 2012 bajo amenaza de despido, los obligaron a firmar un contrato de trabajo a tiempo determinado, que de paso vencía el 31 de diciembre de ese mismo año, lo que termino siendo una gran trampa, ya que luego despidieron a estos 38 trabajadores.
Ante toda esta situación hacen un llamado al Vicepresidente Nicolás Maduro, a la Ministra Eugenia Sader y al Presidente de la A. N. Diosdado Cabello a que se investigue esta situación que está afectando a los trabajadores, que se cancele de inmediato de salarios retenidos y todos los demás beneficios dejados de percibir, que cese de la persecución laboral mediante la amenaza de despidos injustificados, anulación del contrato vencido y obligado a firmar en el mes de diciembre del 2012.
Jairo Garzón Romero
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