847 alumnos se beneficiarían si el Ministerio del Poder Popular para la Educación decide incluir a la Unidad Educativa Nacional Guarenas en el Proyecto de Alimentación Escolar (PAE), tal como lo ha solicitado su directora, Rosa Navas.
El resto de los proyectos educativos gubernamentales sí se llevan a cabo en la institución, como el programa Canaima, Manos a la Siembra y otros en conjunto con Hidrocapital; sin embargo, aún esperan respuesta acerca de la inclusión del colegio en el PAE.
Ratas y filtraciones
Uno de los graves problemas que afronta la sede es creado por la comunidad y los mismos representantes, quienes arrojan basura en la entrada y en el techo. “Algunos vecinos lanzan sus desechos aquí, se bajan del carro y traen las bolsas sin importarles que estudian niños e incluso sus hijos“, denunció Navas.
De acuerdo con sus declaraciones, esto ha traído como consecuencia la presencia de roedores de gran tamaño, lo cual puede originar consecuencias graves para la salud de los estudiantes y de todo el personal; por esta razón la directora hizo un llamado a la conciencia y a las autoridades respectivas.
Por otro lado, se realizó la solicitud al Ministerio de Infraestructura para luchar contra las recurrentes filtraciones que se pueden observar en paredes y techos del plantel.
Excelencia educativa
Uno de los proyectos llevados a cabo por los comités es el de excelencia educativa, consistente en trabajar conjuntamente con los estudiantes de sexto grado y bachillerato con la aspiración de que cada salón escoja una meta que sea de interés común para el plantel y se lleve a feliz término con el apoyo del profesorado, a través de la autogestión.
Para motivar aún más a los alumnos, el comité académico decidió premiar su esfuerzo con una viaje que será financiado con ventas o verbenas escolares realizadas por ellos mismos. Además de este proyecto, se desarrollan las patrullas escolares, la reparación de los huertos, reciclaje en el aula y planes de comunicación e información, este último llevado a cabo con gran ambición por el profesor Antonio Ojeda.
Carlos Peña