La comunidad internacional seguía reaccionando este miércoles al fallecimiento la víspera del presidente venezolano Hugo Chávez, mientras en la región varios países decretaron duelo oficial en su memoria.
Ecuador, Bolivia, Cuba, Uruguay, Brasil, Argentina y Chile, por el momento, decretaron entre tres y siete días de duelo, como en el caso de Bolivia, mientras las autoridades cubanas convocaron a la población a rendir el jueves un «homenaje póstumo» masivo al expresidente venezolano.
Chávez fue homenajeado entre otros por Irán y Rusia, dos de los principales aliados del dirigente bolivariano, y saludado por China como «un gran líder» y «un gran amigo». «Era un hombre fuera de lo común y fuerte, que miraba hacia el futuro y que siempre fue extremadamente exigente consigo mismo», dijo el presidente ruso, Vladimir Putin, en un telegrama de condolencias.
Putin pidió a Caracas que siga «reforzando y desarrollando las relaciones entre Rusia y Venezuela», que firmaron varios acuerdos energéticos y de armamento desde 2005. Desde Teherán, el presidente iraní Mahmud Ahmadinejad destacó que Chávez fue «un mártir por haber servido a su pueblo y protegido los valores humanos y revolucionarios».
Además afirmó que el mandatario venezolano murió «de una enfermedad sospechosa», dando crédito aparentemente a declaraciones del vicepresidente Nicolás Maduro, que el martes acusó a los enemigos del país de haber provocado el cáncer de Chávez.
Chávez, principal aliado regional de Teherán, hizo 13 visitas a Irán durante sus catorce años de poder. Ahmadinejad se desplazó seis veces a Venezuela desde que asumió el poder en 2005.
El gobierno sirio también rindió tributo a Chávez, uno de los pocos dirigentes del mundo que apoyó a Bashar al Asad ante el levantamiento que se transformó en rebelión armada.
«Chávez siempre ha apoyado los derechos legítimos árabes; también ante el complot contra Siria», indicó la agencia oficial siria SANA. El fallecido líder «expresó en numerosas ocasiones su solidaridad con la dirigencia y el pueblo sirios ante el ataque imperialista salvaje», añadió.
Por su lado, China, con quien Chávez estrechó las relaciones comerciales, señaló que el difunto presidente fue «un gran líder de Venezuela y un gran amigo del pueblo chino».
El Vaticano, que se encuentra en este momento sin Papa, envió su pésame a Venezuela por la muerte de Chávez a través del cardenal venezolano Jorge Urosa Savino, indicó el miércoles el portavoz de la Santa Sede, padre Federico Lombardi.
«Sé que el cardenal Jorge Urosa Savino, quien se encuentra aquí en Roma, manifestó ya su participación y pésame e instó a la unidad de esa nación», dijo Lombardi.
En Centroamérica, el gobierno hondureño afirmó que «el presidente Chávez fue un extraordinario líder que luchó por la integración de los pueblos latinoamericanos, legado que deja a las presentes y futuras generaciones de la región».
En México, el presidente Enrique Peña Nieto lamentó la noticia a través de su cuenta en la red social Twitter, en la primera reacción oficial del país. «Lamento el fallecimiento del Presidente Hugo Chávez. Mis más sentidas condolencias a su familia y al pueblo venezolano».
«Reconocemos (en Chávez) un gran líder, una pérdida irreparable y, sobre todo, un amigo de Brasil», dijo por su parte al conocer la noticia la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, emocionada, antes de pedir un minuto de silencio por el mandatario venezolano, al que calificó como un «gran latinoamericano» durante un acto con líderes campesinos en Brasilia.
Con similar vehemencia se había expresado Cuba que en una declaración oficial que señaló que «¡Chávez es también cubano! Sintió en su carne nuestras dificultades y problemas e hizo cuanto pudo, con extraordinaria generosidad».
El presidente estadounidense, Barack Obama, afirmó en cambio de forma escueta que su país apoya a los venezolanos ante el «nuevo capítulo» que se abre ante ellos tras la muerte de Chávez y reiteró que su gobierno tiene interés en «desarrollar una relación constructiva» con Caracas tras años de tirantez.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, alabó a Chávez por enfrentar «los retos y aspiraciones de los venezolanos más vulnerables».
En Europa, el Reino Unido afirmó por su parte que el presidente venezolano dejó una «huella profunda» en su pueblo «y más allá», según reconoció el ministro de Exteriores, William Hague.
El presidente francés, François Hollande, reconoció que Chávez expresaba, «más allá de su temperamento y de sus orientaciones que no todos compartían, una voluntad innegable de luchar en pro de la justicia y el desarrollo».
Alemania, en tanto, dijo esperar la apertura de una nueva etapa en el país sudamericano, que posee las mayores reservas de petróleo del mundo.
«Cuento con que Venezuela vuelva a arrancar después de estos días de duelo», destacó el canciller alemán Guido Westerwelle. «Venezuela tiene un fuerte potencial y la democracia y la libertad son los buenos medios para concretar ese potencial», añadió.
En el mismo sentido se expresaron congresistas demócratas y republicanos estadounidenses, que creen que la muerte de Chávez es una oportunidad de cambio para el país y para las relaciones bilaterales.
Los congresistas hispanos, en particular los cubano-estadounidenses, manifestaron en su mayoría satisfacción por la noticia.
El republicano Marco Rubio, senador por el estado de Florida, declaró: «el pueblo venezolano tiene ahora una oportunidad de pasar la página de uno de los periodos más negros de su historia».
«Hugo Chávez gobernó Venezuela con puño de hierro y su muerte ha dejado un vacío político que esperamos que sea llenado de forma pacífica y a través de un proceso constitucional y democrático», indicó el presidente de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado, el demócrata Robert Menéndez.
«Hugo Chávez era un líder que entendía las necesidades de los pobres», subrayó en cambio el congresista demócrata José Serrano, del Estado de Nueva York, donde la empresa petrolera venezolana Citgo distribuye combustible para los más pobres durante el invierno.
La Unión Europea recibió «con pesar» la muerte de Chávez y dijo esperar «profundizar» las relaciones con Venezuela. «Esperando profundizar nuestras relaciones en el futuro, transmitimos al pueblo y al gobierno venezolanos nuestro sincero pésame y simpatía», señaló la misiva del presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el de la Comisión Europea, José Manuel Barroso.
Chávez falleció el martes a los 58 años en Caracas, víctima de un cáncer que se le diagnosticó a mediados de 2011.
AFP