A la lista de líderes que han sido embalsamados a lo largo de la historia se suma Hugo Chávez fallecido el 5 de marzo a los 58 años. En Argentina, el general Juan Domingo Perón y Evita. En el resto del mundo, decenas de dirigentes.
Tras su muerte el 1 de julio de 1974, el cuerpo de Juan Domingo Perón fue embalsamado y colocado en un cofre en la bóveda de su familia en el Cementerio de la Chacarita. El 26 de julio de 1952 había fallecido su mujer, Eva Perón, y le tocó al especialista español Pedro Ara conservar su cuerpo para siempre.
En el resto del mundo, son los rusos los que tienen el mayor reconocimiento y tradición a la hora de embalsamar a sus muertos.
En Moscú, un laboratorio se ocupa de la conservación del cuerpo de Vladimir Lenin, fallecido en 1924, y que sigue expuesto en un suntuoso sepulcro en la Plaza Roja.
El laboratorio ruso, perteneciente al Instituto de Plantas Medicinales y Aromáticas, tiene en su poder la fórmula que fue aplicada al líder comunista búlgaro Gueorgui Dimitrov (1948), al dictador soviético Joseph Stalin y al presidente checoslovaco Klement Gottwald (ambos muertos en 1953), al dirigente vietnamita Ho Chi Minh (1969), al mandatario angoleño Agostinho Neto (1979) y al presidente socialista de Guyana, Forbes Burnham (1985).
Desde el embalsamamiento de Lenin, los rusos poseen una fórmula mediante la cual se vacía la sangre, se extraen los órganos y se deja reposar el cuerpo en un líquido especial que ayuda a conservar el cuerpo para siempre.
El presidente de Corea del Norte Kim Il-Sung, fue embalsamado por especialistas rusos tras su deceso el 8 de julio de 1994 por un ataque cardíaco, y sus restos reposan en un mausoleo. Su hijo y sucesor Kim Jong Il falleció a los 69 años el 17 de diciembre de 2011. Al año siguiente, su cuerpo embalsamado fue expuesto al público también en un mausoleo.
Otro de los líderes mundiales cuyo cuerpo está conservado de ese modo es Mao Tse Tung quien falleció el 9 de septiembre de 1976.
El cuerpo de Lady Di también fue embalsamado tras su muerte en un accidente de tránsito el 31 de agosto de 1997. El encargado de conservar el cuerpo de la princesa para siempre fue el especialista Jean Monceau quien ha trabajado sobre más de 22.000 cadáveres, entre ellos, el de la actriz Bette Davis (1989) y al modisto Guy Laroche (1989), el del bailarín Rudolph Nureyev (1993) y el del oceonógrafo Jaques Cousteau (1997). Este experto se define a sí mismo como “técnico de la muerte”
A lo largo de la historia otros dignatarios como Felipe El Hermoso, de España; Ricardo II de Inglaterra; Enrique IV de Francia, entre otros fueron conservados con técnicas de embalsamamiento para preservarlos eternamente.
Con información de Clarin.com