VATICANO. El cardenal filipino Luis Antonio Tagle, de 55 años, el más joven de los cardenales que suenan para suceder a Benedicto XVI, es considerado un progresista por su prédica por una Iglesia «humilde», en un país de gran fervor religioso y mucha pobreza.
Especialista del Concilio Vaticano II y teólogo brillante formado en Filipinas y Estados Unidos, Luis Antonio ‘Chito’ Tagle tiene treinta años menos que Benedicto XVI, el Papa que renunció a los 85 años por «falta de fuerzas».
La juventud podría ser una cualidad fundamental para convertirse en el nuevo jefe de la Iglesia católica, que tiene entre sus objetivos conquistar a nuevos fieles y adaptarse a los cambios de la sociedad.
El cardenal Tagle, un hombre afable que se considera ante todo un pastor, tiene a su favor su gran cultura doctrinal y su mente abierta, dos bazas que podrían ayudarle a alcanzar el delicado equilibrio entre ortodoxia y pragmatismo.
Tagle está considerado un progresista, aunque el conservador Benedicto XVI apreciaba «el equilibrio de su visión y el respeto de la doctrina», según el vaticanista Sandro Magister.
A una pregunta sobre sus ambiciones pontificales, Tagle respondió: «La gente quiere estar en relación, es el fundamento de la fe, estar en relación con Dios, estar en relación con los demás, con la Iglesia. Tenemos que volver a ese principio fundamental».
Pero su juventud también podría ser el punto débil de Tagle, que no fue nombrado arzobispo de Manila y primado de Filipinas hasta 2011.
AFP