La tecnología a través de los celulares o de Internet con la gran variedad de páginas que promueven la amistad o el romance ayuda considerablemente a desenmascarar a quien le gusta jugar, en palabras metafóricas, doble play
“A pesar de que el celular es un delator, ninguna mujer o ningún hombre, se merece estar pendiente buena parte de su tiempo de que su cónyuge le sea o no infiel”
Aunque, desde siempre, la infidelidad ha existido, en la actualidad, los infieles cuentan con el celular que es un gran aliado brindado por los adelantos tecnológicos por todas las herramientas que le ofrece a quien comete actos de infidelidad.
Entonces, tanto ellos como ellas, sin que la diferencia de género esté presente, se valen de las ventajas que, cada cierto tiempo, aumentan de los móviles para ser infieles, a veces, sin que la pareja sospeche de su traición u otras haciendo que el cónyuge viva en un estado de zozobra que lo lleve a vigilar cada llamada que entra o mensaje recibido.
Por lo anterior, quien es infiel tiene una doble tarea, pues aparte de vivir su doble vida, deberá cuidar de su celular para evitar que caiga en manos de la pareja quien gracias a este aparatico tendrá la prueba de infidelidad o por lo menos empezará a sospechar que su cónyuge no es sincero debido a llamadas sospechosas o mensajes comprometedores.
1. Los infieles: ¡Cuidado con el celular!
Algunos, quizá los más perspicaces, cuentan con varios celulares porque se hace muy evidente estar escondiéndolo del consorte todo el tiempo. No obstante, sobre todo, las mujeres han mejorado su sexto sentido para saber cuando la pareja anda en malos pasos para, luego, agarrarlo, con las manos en la masa, o como se dice en lenguaje jurídico en flagrancia.
En definitiva, quien tiene una conducta de infidelidad deberá evitar dejar el celular por descuido dándole de ese modo la oportunidad a la pareja de revisarlo para así tener la prueba de su delito. Por lo general, la traición se descubre gracias al celular que una vez que muestra la evidencia incide que la relación termine en una separación, muchas veces, sin posibilidad de reconciliación.
Otros podrán el móvil en vibración para recibir mensajes sin despertar sospechas, pero al final de cuentas el celular de aliado en enemigo puede pasar cuando muestra la evidencia de traición porque siempre se estará propenso a descuidarse ya que no se puede estar alerta las veinticuatro horas del día para disimular fidelidad cuando la misma brilla por su ausencia.
Otros más descarados una vez que llegan a sus casas apagaran el celular o dejaran todo el tiempo la bandeja de entrada vacía para que así no quede rastro de su perfidia. Tales maneras de actuar de modo poco claro con el móvil demuestran ante el otro que hay algo que esconder porque sé es infiel aunque, por diversas razones, haya quien se haga la vista gorda frente a estos actos.
Entonces, los que utilizan los móviles para ser infieles pueden andar con dos o más celulares: Uno que nunca apagan y que, por supuesto, no es el que emplean para comunicarse con la amante de turno; y otro que prenden cuando están lejos de la pareja para que así ella o él no pueda sospechar algo de su comportamiento infiel. Ellos tienen que mantener el segundo móvil bien resguardado para que no caiga en manos del cónyuge víctima de infidelidad o de la esposa traicionada.
2. El celular: ¿Aliado o enemigo del infiel?
Con base en lo anterior, el celular puede ser una gran ventaja para quien es desleal porque le ayuda a comunicarse con la o el amante mediante diferentes vías, como pines, mensajes de textos o llamadas, pero, a la vez, un arma de doble filo, ya que da indicios de que la pareja está traicionando, con lo que quien sospecha partirá de lo que encuentre en este aparatico para profundizar y desenmascarar al cónyuge.
Asimismo, no sólo el móvil ofrece las pruebas de infidelidad a quien las necesita, sino que una vez que se encuentra algo sospechoso, como una conversación a deshora o un mensaje comprometedor, la pareja contrata a un detective o investigador para que éste llegue hasta las últimas consecuencias y descubra las infidelidades del cónyuge. Por esto, parece que la acción de contratar una agencia de investigación para desenmascarar al infiel parte de algún indicio o suceso extraño con el celular que no pasó desapercibido porque algunos que creen que se la saben todas pueden dejar un cabo suelto.
En definitiva, la tecnología a través de los celulares o de Internet con la gran variedad de páginas que promueven la amistad o el romance ayuda considerablemente a desenmascarar a quien le gusta jugar, en palabras metafóricas, doble play, porque, más temprano que tarde, quien sospecha se vale de estas herramientas para descubrir o indagar más en la supuesta infidelidad.
A pesar de que el celular es un delator, ninguna mujer o ningún hombre, se merece estar pendiente buena parte de su tiempo de que su cónyuge le sea o no infiel. Y para ello, cada vez que tenga la oportunidad, revisar el celular de su pareja, las páginas que frecuenta o el correo electrónico, en busca de señales que delaten sus infidelidades o, en caso contrario, demuestren que el compañero sentimental es fiel así que no es necesario permanecer demasiado tiempo pendiente del aparatico en cuestión.
Lo anterior es penoso y ofensivo, así que, después, de una promesa sincera de fidelidad, si el compañero o la pareja femenina vuelve a recurrir a los móviles para hacer de las suyas, es bueno analizar fríamente qué recompensas ofrece esa relación como para tolerar una situación que transforma el amor en decepción una vez que ya no se confía en quien alguna vez nos juró amor eterno frente al altar o un jefe civil, bajo la luna o con cuatro paredes de testigo.
¿Los móviles favorecen la infidelidad?
*** Ciertamente, a la hora de comunicarse: el celular ofrece ciertas ventajas a quien tiene un comportamiento infiel, ya que los mensajes de texto, por ejemplo, son una herramienta fácil de manejar y muy efectiva para mantener contacto con un o una amante sin que la pareja sospeche.
*** A pesar de lo anterior, el celular es de lo primero de que se vale quien tiene sospechas de infidelidad, para desenmascarar al consorte o bien para ir más allá de las dudas y contratar a un detective que busque más pruebas que confirmen la traición de su compañero sentimental