Ayer los deudos de Never Segundo González, de 28 años de edad, hacían trámites para retirar su cuerpo de la morgue de Bello Monte en Caracas y emprender camino rumbo a Paraguaipoa, estado Zulia, en el seno de la etnia wayú.
El goajiro fue localizado sin vida a las 2:00 de la tarde del 27 de febrero. Recibió nueve heridas punzo penetrantes con un pico de botella y lo dejaron tirado en la calle de la urbanización Leoncio Martínez, en Petare, municipio Sucre.
El cuerpo indocumentado fue levantado por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas para llevarlo a la morgue de Caracas. Desde el 27 de febrero permaneció en Bello Monte a la espera de que algún familiar acudiera en reclamo.
Su prima, Karen Silva, dijo que la familia ignoraba el trágico destino de su primo. A finales de febrero la dueña de la pensión donde Never vivía en La Bombilla, Petare, llamó a Paraguaipoa para preguntar a la familia sobre su paradero.
Silva dijo que la última vez que lo vieron fue el 24 de febrero cuando los visitó en El Valle. No se alarmaron por la llamada de la señora porque su primo era fiestero y bebedor. «Podría estar por ahí con los amigos», dijo.
El martes pasado el mejor amigo de González los visitó y les dijo estar preocupado al no saber de Never. Fue cuando entendieron que algo no marchaba bien. Fueron el sábado a la morgue y regresaron el domingo. En este último intento lo reconocieron entre cadáveres no identificados. «Estaba muy golpeado. Pudieron tratar de robarlo», comentó.
Never González era soltero y sin hijos. Era mesonero y trabajaba en el restaurante Tríptico de La Castellana donde solo laboro dos días. Antes trabajó en otros restaurantes y en la panadería Alicantina de Las Mercedes.
Karen Silva dijo que su primo tenía 4 años en Caracas. No era violento ya que tenía varias prótesis en su organismo producto de un volcamiento en un camión que sufrió cuando niño. «No aguantaba un golpe», comentó.
Hace tres años otro primo, Jean Carlos Montiel, de 20 años de edad, fue asesinado en la avenida Andrés Galarraga de Chacao. La autopsia reveló que murió por asfixia mecánica. El joven también era wayú, natural del estado Zulia.