TLAXCALA. Al menos 11 personas murieron, entre ellas un niño, y decenas resultaron heridas el viernes cuando explotó parte de los fuegos artificiales que un grupo de peregrinos llevaba en una camioneta en la que viajaba en la zona centro del país.
La explosión se produjo cuando un cohete encendido cayó sobre el cargamento que iba a ser utilizado para la fiesta religiosa a la que se dirigían los peregrinos y que pudo haber sido lanzando por accidente desde otro vehículo o por uno de los participantes que acompañaba a los feligreses, dijo el director de Protección Civil de Tlaxcala, José Mateo Morales.
Es común que durante las peregrinaciones religiosas se lancen fuegos artificiales durante el trayecto en carretera como muestra de alegría o devoción al santo festejado.
Las primeras versiones señalaron que los heridos sumaban alrededor de 70 personas, pero horas después se redujo a 36 personas, informó un portavoz de protección civil de Tlaxcala, quien dijo que entre los muertos había un niño.
El resto de las víctimas eran ocho hombres y dos mujeres.
«Ellos iban a festejar al santo patrono (del pueblo). Sí, iban varios niños (…) no sabemos en este momento cuántos», dijo una portavoz del municipio de Nativitas, en donde se ubica el poblado de Jesús Tepactepec, donde ocurrió el incidente, entre los estados de Tlaxcala y Puebla.
Un testigo de Reuters dijo que elementos del Ejército llegaron al lugar y acordonaron la zona de la explosión, que al producirse dañó al menos dos vehículos.
Agencias