En plena vía pública en Higuerote, el dicharachero y recogedor de latas fue embestido por un auto en marcha cuyo conductor se dio a la fuga
Un conocido indigente que deambulaba de arriba abajo por las calles de Higuerote, viviendo de lo que le daba la gente y de las ventas a recicladores de las latas de aluminio de cervezas y refrescos que recogía para obtener un dinerito, nunca se imaginó que llegaría al fin de sus días al tratar de cruzar la calzada.
Lo cierto es que “Latica” ya cansado de caminar se dirigía al sitio donde dormía cada noche, cuando un auto de color blanco que pasaba al frente del Comando de la Policía Municipal de Brión, lo golpeó y lo dejó tirado sobre el pavimento y allí expiró instantáneamente.
Según los vecinos del lugar, nadie vio nada solamente se escuchó el impacto y se observó a lo lejos un auto blanco que se perdía del lugar a toda carrera. “Era un hombre sencillo, muy tratable, tranquilo y hasta educado, que daba los buenos días y sabía pedir con respeto”, expresó Cesar Vera, con quien el indigente conversaba todos los días. “Él vivía de las latas de cerveza y refrescos que recogía en las calles y en los basureros, luego de abrir las bolsas y dejarlas como las encontraba, bien cerradas”, agregó
Al sitio del arrollamiento se hizo presente una comisión del Cicpc del Eje de Homicidios de Barlovento al mando del comisario Jorge Quintero, quienes procedieron al levantamiento del cadáver y diligenciar su posterior traslado hasta la morgue de Caucagua, donde se le practicaría la necropsia de ley.
Quienes tuvieron la oportunidad de conocerlo, sabían que “Latica” era un individuo de una estatura alta, de aproximadamente 1.80; de tez morena, de unos 50 años de edad, de contextura delgada, no portaba documentación y no se le conocía familiar alguno, aunque en una oportunidad nos manifestó tener familia en el sector de Barrio Ajuro, comentó quien escribe la nota.
Tarugomar@hotmail.es