El receptor cubano resultó con mayor protagonismo que la artillería ofensiva de venezolanos y dominicanos en la primera semana de grandes ligas
Al menos en esta primera semana de la temporada 2013, no fueron los quisqueyanos José Bautista, Edwin Encarnación,Melky Cabrera o José Reyes las grandes figuras de los renovados Azulejos.
Arencibia estuvo inmenso en el ataque, al disparar siete hits en 19 turnos (.368), de los cuales seis fueron extrabases: tres dobletes e igual cantidad de cuadrangulares.
El receptor de Toronto anotó tres carreras, impulsó cuatro y tuvo un promedio de slugging de 1.000.
Inmenso también estuvo el venezolano Miguel Cabrera, quien empezó el 2013 al mismo ritmo frenético de su bate que tuvo en el 2012, cuando conquistó la Triple Corona de la Liga Americana.
Cabrera se fue en la semana de 19-7 (.368), con cinco anotadas y seis remolques. Su único extrabase fue un biangular y su slugging fue de .421.
Una de las más agradables sorpresas en estos inicios la dio el cubano José Iglesias, campocorto de los Medias Rojas de Boston.
De Iglesias se hablaban maravillas de sus habilidades defensivas, pero su bateo despertaba demasiadas dudas.
Sin embargo, es el cubano quien ostenta el average más alto de todas las Grandes Ligas (.583), producto de siete cohetes en 12 ocasiones.
«Candelita» Iglesias ha antado dos carreras y tiene una impulsada. Entre sus hits suma un doblete y su promedio de slugging es de .667.
Poderoso ha sido también el inicio de Nelson Cruz, el jardinero derecho dominicano de los Vigilantes de Texas. Cruz ha pegado diez hits en 20 turnos, para average de .500, con tres anotadas y cuatro empujadas. Entre sus imparables lleva un par de dobles y un cuadrangular, para slugging de .750. Su compatriota y compañero de equipo Alexi Ogando estuvo inmenso en su primera salida a la lomita.
Ogando trabajó seis entradas y un tercio en blanco frente a los Astros de Houston, a los que les regaló diez ponches, con apenas cuatro hits permitidos.
Y muy buen arranque también tuvo el venezolano Franklin Gutiérrez, de los Marineros de Seattle.
Gutiérrez bateó siete hits en 18 veces, para average de .389, con cuatro anotadas y seis impulsadas.
El guardabosque de Seattle conectó un par de dobletes y llevó dos pelotas sobre las cercas, para un alto promedio de slugging de .833.
Pero mientras algunos han comenzado encendidos la campaña, otros lo han hecho de manera pálida, apagada.
Uno de ellos es el segunda base dominicano de los New York Yankees, Robinson Canó.
A las puertas de una extensión contractual multimillonaria, Canó apenas consiguió un par de hits en 18 turnos, para un anémico promedio de .111, aparte de abanicar en cinco ocasiones.
Igualmente pobre ha sido el venezolano Asdrúbal Cabrera, de los Cleveland Indians.
Cabrera ligó dos imparables en 20 visitas al plato, para average de .100 puntos. Y al igual que Canó, se ponchó cinco veces.
Rosario en la Nacional
Ya el año pasado se ganó la titularidad a fuerza de batazos y para muchos mereció incluso el premio de Novato del Año de la Liga Nacional por encima del escogido Bryce Harper.
Este 2013, que pudiera ser su año consagratorio, Rosario lo ha iniciado con el mismo nivel ofensivo del pasado año y en la primera semana bateó seis hits en 15 turnos, para average de .400.
El catcher de 24 años anotó dos carreras e impulsó tres, disparó un par de vuelacercas y tuvo slugging de .800.
Su compañero de equipo, el venezolano Carlos González, también comenzó el 2013 con el pie en el acelerador. CarGo se fue en la semana de 21-7 (.333), con cuatro empujadas, además de pisar el plato en seis oportunidades.
González despachó dos pelotas sobre las cercas y su slugging fue de .619. En este 2013 podríamos estar asistiendo al nacimiento de la nueva estrella dominicana del campocorto.
Jean Segura inició como titular de la posición en los Cerveceros de Milwaukee y hasta el momento no ha hecho quedar mal a quienes decidieron darle el puesto.
Segura, de 23 años de edad, bateó nueve imparables en 18 turnos, para promedio de .500, con una anotada y par de remolques.
De sus nueve hits, dos fueron extrabases, un doble y un bambinazo, para un ‘slugging’ de .722.
Su average de .500 es el más alto del viejo circuito, igualado con Todd Frazier (22-11), de los Rojos de Cincinnati.
Precisamente, los Rojos deben estar complacidos de la decisión de mantener al lanzallamas cubano Aroldis Chapman como cerrador.
Chapman salió a lanzar en cuatro de los cinco partidos jugó Cincinnati en la semana y no pudo hacerlo mejor: en cuatro episodios apenas permitió un imparable, en tanto dejó a siete bateadores con la carabina al hombro.
El cubano se apuntó un triunfo y un salvamento, mientras su promedio de efectividad se mantuvo inmaculado en 0.00.
Otro cubano sobresaliente desde la lomita fue Gio González, de los Nacionales de Washington.
En su única salida hasta el momento dejó en blanco a los Marlins de Miami en seis episodios, con cinco abanicados y apenas dos hits, para apuntarse su primera victoria de la campaña.
Otro zurdo que salió muy bien en su primera apertura fue el dominicano Wandy Rodríguez, ahora con los Piratas de Pittsburgh.
Rodríguez pintó de blanco en 6.2 episodios a los Cachorros de Chicago, con seis ponches y dos hits permitidos, para llevarse el triunfo.
Glacial ha sido el comienzo del mexicano Luis Cruz, de Dodgers de Los Ángeles.
Cruz no ha sabido aprovechar la oportunidad que le ha dado la vida de ser titular en la antesala en un equipo tan poderoso y con pretensiones de llegar hasta la Serie Mundial.
Al menos en la primera semana, el mexicano no ha existido en lo absoluto en el plato, al irse en blanco en 17 turnos (.000), con cuatro abanicados.
Jorge Morejón
espndeportes.com
