Tocando cacerolas se manifestó un grupo de vecinos de la calle 2-A y 3-A de la urbanización La Urbina, ubicada en el municipio Sucre, repudió los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral- CNE-, exige una nueva auditoria ciudadana para el conteo de los comprobantes de votación.
Juan Tovar, vecino del edificio Caribe, manifestó que una parte del pueblo venezolano se encuentran en descontento con las políticas implementadas del Gobierno actual, y por ende debe ser escuchado y atendidas cada unas de sus exigencias “que por no seguir una tendencia política sus derechos como ciudadanos han sido violentados”.
Resaltó que esta es una protesta simbólica, autoconvocada por unos vecinos que piden a través del ruido de sus ollas, una nueva contabilización de votos, “creemos en la participación popular , pero ya basta de este Gobierno queremos un cambio y defenderemos nuestros votos”.
Denunció que mientras ejercían su protesta, habitantes que ocupan un complejo habitacional ubicado en la zona, comenzaron a instigarlos con músicas, pancartas y gritos a favor de su nuevo comandante de la patria, “ no entiendo del ¿por qué no puede respetar nuestra ideología y nuestras decisiones? si todos somos venezolanos”, se quejó.
Palo Verde también
Según la dirigente vecinal de la urbanización Palo Verde, Eurídice Guerra, los vecinos se unieron a los cacerolazos, como también algunos conductores de vehículos particulares recorrieron el urbanismo tocando cornetas y gritando a todo pulmón que desconocen en su totalidad los resultados.
Hasta al cierre de esta edición, los habitantes con mensajes alusivos a su candidato opositor se mantuvieron desplegados, pero también cuestionaron de cómo fueron intimidades por grupos oficiales quienes tripulaban en motocicleta durante el proceso de votación, el pasado domingo.
Mairy Chourio
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