LONDRES. Un ataúd con el cuerpo de la ex primera ministra Margaret Thatcher fue colocado en una capilla del Parlamento británico antes de su funeral el miércoles, mientras aumentaba el debate por la envergadura de la ceremonia y crecía la lista de invitados.
Envuelto en la bandera británica roja, blanca y azul, el ataúd de Thatcher fue transportado por la calle Whitehall, donde se ubican las dependencias gubernamentales, en una carroza fúnebre negra mientras turistas y trabajadores parlamentarios observaban su paso.
Cuatro personas llevaron el ataúd sobre sus hombros antes de colocarlo dentro de la cripta de la capilla de Santa María Undercroft, un enorme y abovedado lugar de culto completado por el rey Eduardo I de Inglaterra en 1297.
Thatcher, quien gobernó Gran Bretaña entre 1979 y 1990, falleció tras un accidente cerebrovascular el 8 de abril a los 87 años.
La seguridad era elevada mientras los legisladores asistían a un servicio fúnebre privado conmemorando su carrera como la primera ministra con más tiempo en el cargo en el siglo XX.
Sus hijos Mark y Carol también asistieron.
La reunión fue de bajo perfil, a diferencia de la ceremonia planeada para el miércoles de la que algunos legisladores de izquierda dijeron era un caro anuncio político de su gobernante Partido Conservador, que se ubica detrás del opositor Laborista por un 10 por ciento en las encuestas.
La lista de invitados ha generado reportes sobre rechazos diplomáticos.
El martes, un portavoz del primer ministro David Cameron negó que Estados Unidos haya desdeñado a Gran Bretaña al no enviar a ningún funcionario destacado del Gobierno del presidente Barack Obama.
«Absolutamente no», dijo el portavoz.
Obama enviará a George Shultz, secretario de Estado del ex presidente republicano Ronald Reagan, y James Baker, quien ocupó varios cargos destacados tanto en el Gobierno de Reagan como en el de George H.W. Bush.
Agencias