La imputación es una figura legal que coloca a la integrante de la realeza española bajo investigación judicial, aunque formalmente no está acusada de delito alguno y no significa que vaya a sentarse en el banquillo
MADRID. La hija mediana del rey Juan Carlos de España, la infanta Cristina, acompañaría a Qatar a su esposo, Iñaki Urdangarin, si finalmente acaba trabajando para la selección de balonmano del emirato, según afirmó ayer el abogado de éste, Mario Pascual Vives. «Si fuera, que no me consta que vaya, estoy convencido de que la infanta iría con él», dijo a la prensa Pascual Vives, quien defiende a Urdangarin en el caso de corrupción en el que está imputado.
Urdangarin, exjugador de balónmano, recibó una oferta del exseleccionador español Valero Rivera para acompañarlo como asistente en Qatar, donde asumirá la dirección del equipo nacional de dicho deporte. Sin embargo, según fuentes del entorno de Urdangarin citadas por medios españoles, dicha opción ha perdido fuerza en los últimos días, en vista de que el yerno del rey de España carece del título de entrenador, y ello dificulta el ser contratado. No obstante, las mismas fuentes aseguran que las negociaciones no se han roto.
Urdangarin es sospechoso junto con su exsocio Diego Torres de haberse enriquecido con contratos públicos que firmaba beneficiándose de su parentesco con el rey, operaciones que realizaban a través de una asociación sin ánimo de lucro, el llamado Instituto Nóos.
A principios de abril, el juez instructor José Castro de los juzgados de Palma de Mallorca decidió imputar también a la infanta, al considerar que fue «cooperadora necesaria» y «cómplice» de dichos delitos.
Sin embargo, según anunciaron ayer fuentes judiciales, la Audiencia Provincial de Palma no se pronunciará hasta el 20 de mayo sobre el recurso presentado por la Fiscalía Anticorrupción contra la imputación de Cristina, al considerar que la medida se basaba sólo en «sospechas personales», «equívocas» y «especulativas» por parte del juez.
La declaración de una hija del rey de España ante la Justicia como imputada sería un hecho inédito en la historia reciente de la monarquía española, cuya imagen ha sufrido severos daños debido al «caso Nóos». Si se acepta el recurso, la infanta quedaría libre de sospecha. Si se rechaza, el juez podrá citarla a declarar.
En un auto el 3 de abril, José Castro, magistrado instructor de Palma de Mallorca, imputó a la infanta Cristina de Borbón y Grecia al considerar que pudo ser «cómplice» de las supuestas actividades delictivas de Urdangarin, añadió AP.
Castro sostiene que el yerno del rey y su socio se apropiaron supuestamente de unos 5,6 millones de dólares en subvenciones públicas asignadas entre 2004 y 2006 a un instituto sin ánimo de lucro relacionado con el mundo del deporte que presidía Urdangarin.
La fiscalía y el abogado defensor de Cristina decidieron recurrir la imputación. Esa apelación es la que se fallará en mayo. La imputación es una figura legal que coloca a la infanta bajo investigación judicial, aunque formalmente no está acusada de delito alguno y no significa que vaya a sentarse en el banquillo.
Pero Cristina, séptima en la línea de sucesión al trono de España, es el primer familiar directo de los monarcas imputado judicialmente, lo que ha provocado un gran revuelo en una sociedad muy sensible a escándalos de corrupción en un momento de recesión y con el desempleo en el 26%.
Agencias