Vecinos están tan decepcionados de la situación que ni siquiera quisieron aportar sus declaraciones a la prensa
Quienes pensaron que una capilla velatoria en el cementerio municipal resolvería sus problemas a la hora del sepelio de algún ser querido, se equivocaron, ya que la capilla quedo a medio construir y solo sirve para guardar escombros, piedra, tierra, tela de araña y bastante monte.
Ningún vecino quiso declarar sobre esta capilla, otros solo se sugirieron preguntar en la prefectura, nadie parece acordarse cuántos años lleva esta capilla en construcción.
En la medida que indagábamos los vecinos parecían tener amnesia ya que no recordaban nada sobre esta capilla.
Los que casi hablaron fueron los difuntos del cementerio de Tacarigua, municipio Brión, que parecieran «pedir a gritos» que les hagan un cariñito con el mantenimiento, antes de que desaparezcan entre el montanal, el abandono y la desidia.
En el cementerio de Tacarigua , el camino real se perdió, entre las tumbas y el monte que crece y crece. Al hacer un recorrido por el Campo Santo, pudimos ver la basura acumulada, la falta de cuidado de casi todo el Cementerio. En este cementerio son pocas las familias que atienden a sus difuntos.
El llamado es para que se haga la supervisión necesaria de estos campo santos para que el personal que la Alcaldía tiene allí asignados, cumpla con el trabajo para lo cual fue encomendado, igualmente se hace un llamado para que las familias de las tumbas más viejas se dirijan a hacerle un mantenimiento, y que la Alcaldía decrete que si se hace responsable de las tumbas abandonadas, el doliente deberá cancelar una cuota por el mismo.
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