El oficialismo se concentró en la Plaza O’Leary en el centro de Caracas y manifestó su resplando al presidente Nicolás Maduro y a la nueva Ley del Trabajo; mientras que sus adversarios políticos lo hicieron en Chacao para reprochar el incremento “chucuto” del salario, liderados por el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski
El oficialismo y la oposición de Venezuela festejaron el Día Internacional del Trabajador con sendas marchas, con discursos duros y bien diferenciados pero pacíficas, pese a los enfrentamientos que marcan la actual coyuntura política.
El oficialismo realizó una multitudinaria marcha que concluyó con un acto, encabezado por el presidente Nicolás Maduro, quien aseguró que Venezuela no esta «polarizada» sino «movilizada» porque hay una democracia movilizada de «pueblo protagonista en la calle».
La oposición expresó su rechazo a las políticas laborales del Gobierno y por las repercusiones de la crisis política que vive el país desde las elecciones del 14 de abril. Trabajadores públicos y privados, así como estudiantes y personas de la tercera edad, se sumaron a familias enteras que pedían, en sus palabras, una «Venezuela libre».
El jefe de Estado Nicolás Maduro, destacó en la avenida Bolívar, que en una fecha como el 1º de mayo se debe reafirmar el compromiso de todos los trabajadores con la construcción del socialismo en Venezuela.
