El Gobierno de la República presentó hoy un plan para reducir en 1.000 megavatios el consumo de electricidad e incorporar una cantidad similar a la capacidad de generación, lo que representaría un incremento del 20 % de la disponibilidad de la red actual como parte de un plan a ejecutar en 100 días.
Dos semanas después de militarizar el sistema y de declarar la emergencia de un sector en el que las fallas suelen ser habituales, el ministro de Energía, Jesse Chacón, explicó en rueda de prensa que la iniciativa busca equilibrar la demanda y la generación en el sector eléctrico.
«El objetivo de este plan de 100 días es abrir una ventana de 2.000 megavatios, es decir 20 % de reserva del sistema, para poder acometer un programa de mantenimiento y modernización de la línea de transmisión, de la red de distribución», dijo.
La incorporación de los 1.000 megavatios se hará a través de la culminación de obras, de la «rehabilitación» de proyectos y de la entrada de «energías alternativas», añadió Chacón. En tanto, la disminución del consumo recaería en un 46 % sobre los grandes usuarios públicos y privados.
El ministro señaló que el sistema está actualmente «en una zona crítica», dado que la generación es de hasta 19.000 megavatios y en horas pico la demanda ronda los 18.000 megavatios. «El reto es primero estabilizar el sistema para posteriormente ir al desarrollo de la matriz eléctrica que soporte nuestro crecimiento social y nuestro desarrollo industrial en los próximos 20 años», expresó.
Además, el ministro se mostró confiado en llegar a una «mediación entre Estado y sociedad» para que se haga un uso racional y eficiente de la energía.
El plan contempla también la sustitución de 30 millones de bombillas y el reemplazo de equipos considerados ineficientes. Chacón sostuvo que desde la llegada del chavismo al poder en 1998 y hasta el 2012 se registró un aumento del 69 % en la demanda eléctrica y vinculó ese incremento a «la mejora en la calidad de vida de los venezolanos».
El Gobierno venezolano puso en marcha el 23 de abril una militarización del sistema eléctrico y declaró también la entrada en vigor de una emergencia del sector que durará 90 días con el fin de «estabilizar» la red de energía del país.
El de la electricidad es uno de los temas de constante controversia en Venezuela, que en febrero de 2010 sufrió una fuerte crisis eléctrica que obligó al Gobierno a aplicar medidas para reducir el consumo. El Gobierno suele denunciar sabotajes en el sistema eléctrico, de los que responsabiliza a la oposición. EFE