En la historia de Grandes Ligas, sólo 16 peloteros han sumado al menos 1.624 hits en sus primeras nueve campañas como ligamayoristas. En la parte baja de dicha lista se encuentran Stan Musial (1.624), Lloyd Waner (1.651) y Chuck Klein (1.651).
Dichas cifras alcanzadas por estos tres miembros del Salón de la Fama quizás no sean intrínsecamente significativas, pero sí nos ayudan a evaluar la trayectoria del intermedista de los Yankees, Robinson Canó. En sus primeras ocho temporadas en la Gran Carpa, el quisqueyano de 30 años de edad ha promediado 182 imparables por año. De mantener ese nivel, estaría en posición de terminar la campaña del 2013, su novena en Grandes Ligas, con 1.641 hits.
Con un sencillo en la tercera entrada el jueves contra los Rockies de Colorado en el Coors Field, Canó registró su imparable 1,500 de por vida. También conectó un jonrón, lo cual le da 558 extrabases en su carrera.
«Significa mucho», dijo Canó acerca de haber alcanzado la cifra redonda en imparables. «Es un sueño hecho realidad. Cuando llegas a Grandes Ligas, quieres tener éxito».
Canó es el 52do jugador en la historia que ha alcanzado 1,500 hits en sus primeras nueve campañas en Grandes Ligas. Es el quinto segunda base y el cuarto jugador de los Yankees que logra dicha hazaña.
Billy Herman (1,540), Chuck Knoblauch (1,533), el boricua Roberto Alomar (1,522) y Red Schoendienst (1,513), son los únicos otros intermedistas en esa categoría.
Los otros jugadores de los Yankees que han sumado al menos 1,500 hits en sus primeras nueve temporadas de Grandes Ligas con Joe DiMaggio (1,663), Earle Combs (1,577) y el capitán, Derek Jeter (1,546). De estos jugadores peloteros, sólo DiMaggio supera a Canó en extrabases en sus primeras nueve campañas como ligamayorista.
A pesar de que las dimensiones del Yankee Stadium favorecen a los bateadores zurdos, Canó cuenta con mejor registro en la ruta .342 que en el hogar .280. Incluso registra más bambinazos, cinco fuera de su propio hogar.
Roger Schlueter
mlb.com