El padre Pedro García, párroco de un suburbio de Guayaquil (suroeste), fue cesado por el arzobispo de esa ciudad
ECUADOR. Un sacerdote ecuatoriano fue suspendido de sus funciones tras ser acusado de abusar sexualmente de una menor, informó el miércoles un portavoz de la Iglesia católica local.
El padre Pedro García, párroco de un suburbio de Guayaquil (suroeste), fue cesado por el arzobispo de esa ciudad, monseñor Antonio Arregui, al tiempo que fue remitido al Vaticano un expediente en su contra.
«Apenas se supo del problema, monseñor Antonio (Arregui) habló con el sacerdote y lo suspendió, lo removió de la parroquia y se inició el expediente que ya fue enviado a la Santa Sede», dijo a la prensa César Piechestein, vocero de la arquidiócesis.
Piechestein subrayó que «la posición de la Iglesia es tolerancia cero» con esta clase de abusos. «No podemos jamás ser cómplices, callar, ocultar una situación de estas», sostuvo, y agregó que la Iglesia está cooperando con la investigación de la Fiscalía.
AFP