La gobernadora del estado de Oklahoma, Mary Fallin, dijo a la prensa que el tornado, que afectó principalmente a la localidad de Moore, de 55.000 habitantes, también provocó «un gran número de heridos».
El servicio meteorológico nacional calificó la fuerza de tornado como EF-4 en la escala de magnitud de estos fenómenos, lo que supone vientos que van desde los 260 hasta los 320 km/h, más importante que un huracán de categoría cinco.
La cadena de televisión local KFOR, filial de NBC, había indicado anteriormente que había personas desaparecidas entre los escombros de la escuela primaria Plaza Towers.
Angustiados padres, mantenidos alejados por los equipos de emergencia, se agrupaban el lunes cerca de los escombros, según los medios locales, que mostraban decenas de miembros de los equipos de rescate buscando entre los restos.
El mortal tornado también afectó la escuela primaria Briarwood.
El presidente Barack Obama «está siguiendo la evolución de la situación», dijo un responsable de la Casa Blanca, y la FEMA, los servicios federales de emergencia, están en alerta y dispuestos a prestar toda la asistencia necesaria.
Los tornados suelen afectar las planicies de Oklahoma, situadas en el llamado «Corredor de Tornados», pero rara vez alcanzan zonas habitadas como este lunes.
El domingo, nubes en forma de embudo fueron observadas en ciudades como Edmond y Shawnee, también en Oklahoma.
AFP