¿Cómo es que un sujeto autor de por lo menos 15 homicidios anda en las calles? ¿Quién le suministró las granadas a “El Pache”? ¿Queremos vivir en una “patria nueva” en la que una vedette queda en libertad, a pesar de ayudar a un malandro a escaparse de la cárcel?
“¿Lees la Biblia?”.
Tras esa pregunta que era el preludio de una ejecución, Jules Winnfield –encarnado magistralmente por Samuel L. Jackson-, tomaba aire y con los ojos desorbitados, le recitaba con vehemencia al sujeto que iba a liquidar, el versículo 25:17 de Ezequiel. Al terminar el pasaje bíblico, junto a su compañero de andanzas criminales, Vincent Vega –personificado por John Travolta, en el rol que lo rescató del olvido-, descargaban sobre el infortunado todas las balas de sus respectivas pistolas nueve milímetros.
Ese extracto de Pulp Fiction, que aquí se conoció como Tiempos Violentos, lo recordé al enterarme de cómo acabó la saga delictiva de uno de los criminales más buscados de Guarenas, conocido como “El Pache”.
Oficialmente, estaba siendo investigado por la autoría de 15 homicidios, sin embargo, policías me confiaron de manera informal que serían no menos de 30 los asesinatos que cometió el malandro que fue dado de baja por la policía de Guarenas el pasado jueves en la madrugada.
Tarantino se quedó cortó
No creo que a la maquiavélica mente de Quentin Tarantino -que además de Pulp Fiction, también fungió de productor y director de Reservoir Dogs e Inglourious Basterds, entre otras-, se le hubiese ocurrido una de las tantas barbaries ejecutadas en la vida real por “El Pache”.
En uno de sus homicidios, el azote de Guarenas llamó por teléfono a la madre de un joven y puso el altavoz: lo torturó junto a sus secuaces, le cortó la lengua para luego acribillarlo a tiros, sin que los ruegos desesperados de la mujer que se escuchaban por el parlante del blackberry frenaran semejante maldad que acabó con la vida de su hijo.
Posteriormente, el cadáver del joven fue hallado casi calcinado.
Verdugo pidió clemencia
Mi padre siempre decía “verdugo no pide clemencia”, cuando alguien daba un mal paso y luego suplicaba que no le aplicaran la misma medicina. Así ocurrió con “El Pache” y por su nexo con un elemento religioso fue que recordé a Tarantino. La policía allanó el sitio donde se “enconchaba” el delincuente, que estaba apertrechado con pistolas de alto calibre y hasta granadas, junto a un secuaz. Al iniciarse el tiroteo, a los efectivos les lanzan uno de los artefactos explosivos, el cual no estalla porque no le quitaron la espoleta. Dan de baja al acompañante al azote, quien se esconde, ya muy malherido detrás de unas gaveras. Cuando es hallado por los policías, se arrodilla y empieza a rezar el Padre Nuestro en medio de frases incoherentes. Con lágrimas en los ojos, sollozaba “no me maten”, en el momento que funcionarios de Poliplaza lo trasladaban a un hospital, falleciendo cuando era intervenido quirúrgicamente.
¿La patria nueva?
En verdad que al hurgar en lo hecho por este criminal, me invade una mezcla de repulsión y miedo. Lo admito.
Pero más repulsión y miedo siento al ver cómo el caso de “El Pache”, transciende cualquier ficción, para tornarse en una tenebrosa realidad que nos afecta día a día, amparada en un estado de complicidad generalizada que ejemplifica, una vez más, el colapso institucional y de los principios familiares.
¿Cómo un sujeto investigado por al menos 15 homicidios anda en las calles? ¿Qué clase de “patria nueva” es esta que ignora olímpicamente la realidad que padecemos millones de venezolanos que andamos sin escoltas ni camionetas blindadas? ¿Queremos vivir en una “patria nueva” en la que una vedette queda en libertad, a pesar de ayudar a un malandro a escaparse de la cárcel? ¿Quién le suministró las granadas a “El Pache”?
De vivir en Venezuela, a Tarantino le sobraría inspiración para sus nuevas películas con las cosas que se ven en esta “patria nueva”…
Ezequiel 25,17
“El camino del hombre recto está por todos lados
rodeado por las injusticias de los egoístas
y la tiranía de los hombres malos.
Bendito sea aquel pastor que en nombre de la caridad
y de la buena voluntad saque a los débiles del Valle de la Oscuridad
por que es el auténtico guardián de su hermano
y el descubridor de los niños perdidos.
Y os aseguro que vendré a castigar con gran venganza
y furiosa cólera a aquellos que pretendan envenenar y destruir a mis hermanos,
y tu sabrás que mi nombre es Yahvé cuando caiga mi venganza sobre ti”.
LA FRASE
“¿Hasta cuándo la Historia de Venezuela va a continuar contándose en términos morales? ¿Hasta cuándo vamos a dividir nuestros gobernantes en buenos y malos?”.
José Ignacio Cabrujas
NO LE DUELEN A NADIE
A esta hora, 15 niños junto a sus padres y familiares andan deambulando por las calles Caracas sin saber qué comerán y dónde dormirán esta noche.
Todo gracias a la “humanista” Guardia Nacional Bolivariana, que el pasado miércoles los “invitó” a salir “por las buenas o por las malas” del refugio Willian Lara ubicado en La Urbina.
Debieron devolverse a ese sitio porque unos delincuentes se apropiaron de las casas que el Gobierno les asignó en el complejo habitacional Santa Rosa, en la carretera Charallave-Ocumare, de Valles del Tuy. A punta de pistolas los botaron de las viviendas sin que ni siquiera pudieran llevarse sus enseres.
Los burócratas de Vicepresidencia, les dijeron el pasado viernes que para ellos no habían más refugios ni casas porque ya les habían sido asignadas. ¿El resultado de tanto “humanismo”?: Hoy cumplen cinco días como nómadas, sin que a nadie les duela su drama.
AL CIERRE
* Nueva encuesta sobre las elecciones regionales mañana en La Voz
* Tres invasiones en cuatro días: Dos en el municipio Sucre del estado Miranda y otra ayer en Guarenas… ¿casualidad?
* La Asociación de Líneas Aéreas de Venezuela confirmó esta semana lo que publicamos aquí hace cuatro domingos: se agotaron los boletos para los principales destinos internacionales y nacionales para la época navideña… después no se quejen si el chavismo arrasa el 16-D
SIN RODEOS
Richard Sanz
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