El Hamburgo se impuso ayer por 3-2 al Werder Bremen en una nueva edición del duelo del norte de Alemania en medio de una temporada en la que los dos equipos están rindiendo por debajo de sus expectativas.
El venezolano Tomás Rincón entró en el campo en el minuto 83 para sustituir al holandés Rafael Van der Vaart, con el propósito de estabilizar la contención y mantener la ventaja del Hamburgo.
El Bremen se fue en ventaja en el minuto 9 con un remate de cabeza del congoleño Lukimya.
Hasta ese momento, el Bremen había tenido dos posibilidades de gol, con remates de Junowitz y de Mehmey Eckici, mientras que el Hamburgo había tenido una buena llegada por la izquierda de Marcell Jansen, cuyo centro no encontró rematador.
El Hamburgo logró el empate en el minuto 23, con una jugada individual del coreano Son por la banda izquierda que culminó con un remate al segundo poste desde un ángulo bastante cerrado.
Tras el empate, el Hamburgo empezó a tener un ligero dominio sobre el partido y al comienzo de la segunda parte esto se tradujo en el marcador con el gol de la ventaja, marcado por Dennis Aogo con un remate dentro del área.
El tercero lo marcó Rudnevs, al definir desde el borde del área pequeña en el minuto 51, aprovechando un buen centro de Aogo.
El partido parecía sentenciado pero el Bremen logró el descuento a los dos minutos, con un remate del griego Sokratis a pase del checo Theor Gebre Selasie.
El partido estaba abierto y se siguió disputando de manera bastante intensa con acciones ofensivas de parte de ambos equipos.
La ocasión más clara para empatar la tuvo para el Bremen en el minuto 61 el belga Kevin de Bruyne, que remató de cabeza por encima de la portería tras recibir un centro excelente del austríaco Marco Arnautovic.