GUATEMALA. Al menos tres personas murieron y otra resultó herida en diferentes ataques perpetrados ayer por desconocidos contra unidades de transporte público de Guatemala, hechos que las autoridades atribuyen a las pandillas juveniles.
Un portavoz de los Bomberos Voluntarios dijo a los periodista que el primer hecho se registró en la periferia este de la capital guatemalteca, cuando un desconocido que viajaba como pasajero en una unidad de transporte disparó contra Julio Roberto Puac, de 36 años, chófer de la unidad, al que le causó heridas de gravedad.
Casi al mismo tiempo, en un barrio popular de la periferia oeste de la capital, hombres no identificados mataron a tiros a Estuardo Alfredo Hernández, de 25 años, inspector del servicio de transporte del municipio de Villa Nueva.
En el tercer ataque de este miércoles, el chófer y el ayudante de una unidad de transporte que viajaba hacia la ciudad de Antigua, fueron asesinados por dos hombres en una transitada calzada del oeste de la capital.
El chófer asesinado fue identificado como César Augusto Guerra, de 35 años, mientras que el nombre del ayudante se desconoce.
Según testigos, los asesinos huyeron del lugar del crimen a bordo de una motocicleta y un taxi que los esperaban, y lograron escapar de soldados que les trataron de atrapar.
En lo que va de año, según estadísticas de la Procuraduría de los Derechos Humanos, más de 75 personas han sido asesinadas en Guatemala en sucesos relacionados con ataques al servicio de transporte público.
Las autoridades atribuyen estos ataques a integrantes de las pandillas de delincuentes juveniles, que aplican las extorsiones, coordinados por sus cabecillas, muchos desde las prisiones del país.
Según cifras oficiales cada día son asesinadas en Guatemala un promedio de 16 personas, lo que ha convertido a este país en uno de los más azotados por la violencia en América Latina.
Agencias