En menos de una semana parroquias como El Recreo, Altagracia y San Bernardino han sido escenario de intentos de invasión o parciales desalojos, donde los tomistas han utilizado la violencia como mecanismo de defensa. El último hecho ocurrió durante la noche de este jueves en la quinta San José de San Bernardino que fue allanada por los cuerpos policiales y al ver pruebas de hechos delictivos procedieron a desalojar el inmueble, actualmente se encuentra parcialmente tomado por 4 mujeres.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, explicó como la invasiones tiene en constante tensión y miedo a los ciudadanos, que ven la posibilidad de perder su propiedad y hasta la vida en cualquier momento. “Esta semana se han escenificado dos intentos de invasión uno en el Teatro Las Palmas parroquia El Recreo, que fue desalojado luego de la presión vecinal, y en el edificio Santa Ana de la esquina del Guanábano en Altagracia el cual sigue tomado por 40 persona que se identifican como un frente de motorizados. El derecho a la propiedad está en riesgo y los organismo del estado no actúan”, dijo.
Rojas relató que este lunes pasadas la medianoche, en la esquina Guanábano de la avenida Baralt unas 40 personas, encabezadas por mujeres y niños, forzaron la puerta del edificio Santa Ana. Allí en la planta baja funciona un local comercial y en uno de los dos pisos vivía una persona que avisó sobre los sucesos. “Los vecinos de la zona norte de Caracas no encontramos aterrorizados porque ya hemos tenido ejemplos de otras tomas ilegales que con el pasar de tiempo se convierten en centros delictivos, donde los robos, atracos, trafico de drogas, secuestros y hasta homicidios se perpetran en sus estructuras”.
Destacó que igualmente en el mismo momento a las 11pm del lunes más 70 personas sometieron al efectivo de la Guardia Nacional y a los vigilantes que custodiaban el Centro Médico Las Palmas y entraron a la fuerza, tomaron tres pisos de la edificación, donde ocasionaron daños como paredes rotas y rayadas, puertas forcejeadas y vidrios también rotos. “En ese caso gracias a la denuncia oportunidad de los ciudadanos se desplegó la Guardia Nacional y en pocas horas fueron sacados del inmueble, conforme a relatos de la vigilancia los tomistas destrozaron equipos médicos”, afirmó.
El luchador social explicó que en el caso de la Quinta San José, ubicada en la avenida Francisco Javier Uztari de San Bernardino, la invasión es parcial ya que solo quedan 4 invasoras que desde ayer jueves se niegan a desalojar. “Esta casa está invadida desde hace 3 años y el posible desalojo se produjo gracias al allanamiento del inmueble por el CICPC donde encontraron pruebas de hechos delictivos y se percataron que esta también era una toma ilegal”.