El líder bolivariano Nicolás Maduro arreció el lunes los ataques contra sus adversarios, acusando de ineficiencia, corrupción y alcoholismo a los gobernadores de la oposición y anunciando el enjuiciamiento de uno de ellos.
Maduro, quien aún lidia con una crisis de legitimidad por las acusaciones de que se robó las elecciones presidenciales de abril, ha emprendido una campaña de desprestigio y persecución contra sus adversarios políticos, tildándoles de corruptos y desestabilizadores, y ordenando a la fiscalía que les encause.
El lunes, Maduro enfiló sus baterías contra el gobernador del estado Miranda y máximo representante de la oposición venezolana, Henrique Capriles, el del estado Lara, Henri Falcón, y el del estado Amazonas, Liborio Guarulla. “Los tres gobernadores que tiene la derecha fascista son tres vagos, incapaces, tienen abandonados sus estados”, expresó Maduro en un evento realizado en Amazonas.
Y fue precisamente contra el gobernador de ese estado que el heredero político del fallecido presidente Hugo Chávez en esta ocasión promulgó sus más duras palabras. “Es un gobernador muy corrompido, muy borracho y todo el mundo sabe que es así. Da vergüenza que él se haya levantado de la nada gracias a la revolución, nos traicionó y está medrando del poder y el pueblo tiene que hacer algo porque el estado está abandonado”, comentó.
Y en lo que vaticina los venideros problemas legales de Guarulla, Maduro anunció que su régimen “intervendrá” la policía del estado para “investigar los crímenes y la corrupción, y ponerlos al servicio del pueblo”. Esos crímenes de corrupción involucran el proyecto de para la construcción del hospital principal del estado, cuyo desarrollo ha estado en manos del estado por más de diez años sin que se haya concretado la obra, dijo.
Y dando entender que el pronunciamiento de las cortes contra el gobernador puede darse por hecho, Maduro anunció que Guarulla pronto saldrá de la gobernación para ir directo a la cárcel “por ladrón”. Las cortes venezolanas, manejadas por jueces nombrados directamente por el chavismo, tienen una larga historia de pronunciarse a favor de los planteamientos del régimen.
No obstante, el gobernador del estado Amazonas se defendió. “La gente del estado sabe que no consumo drogas ni alcohol. Si alguien ha hablado de eso, imagino que anda en una situación parecida”, comentó Guarulla, en declaraciones publicadas por el portalNoticias24.
De concretarse, el caso judicial contra Guarulla se sumaría a la ya abultada lista de enjuiciamientos e investigaciones iniciadas contra los líderes de la oposición venezolana, quienes son acusados desde la malversación de fondos y la alteración del orden público hasta conspirar con la CIA para derrocar el régimen de Maduro.
El propio Capriles, quien compitió contra Maduro en las elecciones presidenciales de abril, es actualmente investigado por, según el gobierno, instigar los fallecimientos producidos a los días siguientes de los comicios, aún cuando el líder opositor más bien utilizó su prestigio para recomendar a sus seguidores que no salieran a las calles a protestar el pronunciamiento del chavista Consejo Nacional Electoral (CNE).
Con información El Nuevo Herald