«Es uno de los jugadores más talentosos de la historia del fútbol. Cambió con su mentalidad y su entusiasmo al Barcelona. Es un jugador increíble. No necesita nada para hacer jugadas y goles, crear ocasiones», dijo Guardiola sobre el brasileño, al que no llegó a dirigir en el club azulgrana.
El Bayern Múnich se impuso este martes en Agadir al Guangzhou Evergrande chino por 3-0, en semifinales del Mundial de Clubes, y jugará la final del sábado contra el ganador del duelo que disputan el miércoles en Marrakech el Atlético Mineiro y el Raja Casablanca marroquí.
«No me importa el rival en la final. Nos tendremos que preparar física y mentalmente. Es tal vez la única oportunidad en nuestras vidas de ganar el Mundial de Clubes, porque no sabemos si podremos volver a jugar este torneo», señaló Guardiola.
«Tratar de ser el mejor equipo del mundo es un desafío. Vamos a tratar de jugar lo mejor posible en la final para tratar de ganar el trofeo», añadió.
«Veremos y estudiaremos las cualidades del otro finalista y trataré de convencer a mis jugadores de la oportunidad que tienen para ganar este título», añadió el español.
El Bayern Múnich se impuso sin dificultades al equipo chino con goles del francés Franck Ribery, el croata Mario Mandzukic y Mario Gotze.
«Tuvimos la posesión del balón, lo monopolizamos. Cada jugador estuvo en su sitio, controlamos el partido, estuvimos concentrados y evitamos sus contragolpes, que sabíamos que eran peligrosos. Ahora espero que por primera vez un equipo alemán gane el título», dijo Guardiola.
«Jugamos bien y no les dimos la oportunidad de correr y de crear contragolpes que salieran de las botas del argentino (Darío) Conca, que es un superjugador», explicó Guardiola.
El técnico del Bayern Múnich también elogió a su jugador francés, Franck Ribery.
«Es un honor para mí poder entrenar a Franck. Es increíble. Muy buen jugador. Trabaja mucho, sigue a su rival y corre varios metros hacia atrás para que el adversario no pueda salir», explicó Guardiola.
Por último, el técnico del Bayern se mostró favorable al uso del aerosol que utilizan los árbitros para marcar el lugar de una falta o el sitio en que se deba colocar la barrera, que los árbitros tienen en este Mundial de Clubes.
«Me gusta. El rastro del aerosol se va después de 15 o 20 segundos. Las reglas dicen que la barrera debe estar a una distancia y con este aerosol el árbitro hace que se respete. Es una buena idea. Espero que se mantenga y no desaparezca en el futuro», concluyó Guardiola.
AFP
«Es uno de los jugadores más talentosos de la historia del fútbol. Cambió con su mentalidad y su entusiasmo al Barcelona. Es un jugador increíble. No necesita nada para hacer jugadas y goles, crear ocasiones», dijo Guardiola sobre el brasileño, al que no llegó a dirigir en el club azulgrana.
El Bayern Múnich se impuso este martes en Agadir al Guangzhou Evergrande chino por 3-0, en semifinales del Mundial de Clubes, y jugará la final del sábado contra el ganador del duelo que disputan el miércoles en Marrakech el Atlético Mineiro y el Raja Casablanca marroquí.
«No me importa el rival en la final. Nos tendremos que preparar física y mentalmente. Es tal vez la única oportunidad en nuestras vidas de ganar el Mundial de Clubes, porque no sabemos si podremos volver a jugar este torneo», señaló Guardiola.
«Tratar de ser el mejor equipo del mundo es un desafío. Vamos a tratar de jugar lo mejor posible en la final para tratar de ganar el trofeo», añadió.
«Veremos y estudiaremos las cualidades del otro finalista y trataré de convencer a mis jugadores de la oportunidad que tienen para ganar este título», añadió el español.
El Bayern Múnich se impuso sin dificultades al equipo chino con goles del francés Franck Ribery, el croata Mario Mandzukic y Mario Gotze.
«Tuvimos la posesión del balón, lo monopolizamos. Cada jugador estuvo en su sitio, controlamos el partido, estuvimos concentrados y evitamos sus contragolpes, que sabíamos que eran peligrosos. Ahora espero que por primera vez un equipo alemán gane el título», dijo Guardiola.
«Jugamos bien y no les dimos la oportunidad de correr y de crear contragolpes que salieran de las botas del argentino (Darío) Conca, que es un superjugador», explicó Guardiola.
El técnico del Bayern Múnich también elogió a su jugador francés, Franck Ribery.
«Es un honor para mí poder entrenar a Franck. Es increíble. Muy buen jugador. Trabaja mucho, sigue a su rival y corre varios metros hacia atrás para que el adversario no pueda salir», explicó Guardiola.
Por último, el técnico del Bayern se mostró favorable al uso del aerosol que utilizan los árbitros para marcar el lugar de una falta o el sitio en que se deba colocar la barrera, que los árbitros tienen en este Mundial de Clubes.
«Me gusta. El rastro del aerosol se va después de 15 o 20 segundos. Las reglas dicen que la barrera debe estar a una distancia y con este aerosol el árbitro hace que se respete. Es una buena idea. Espero que se mantenga y no desaparezca en el futuro», concluyó Guardiola.
AFP
