«Le pedimos a la comunidad internacional que sea solidaria con nuestros esfuerzos y que ayude al gobierno a entender la importancia de tener una transformación significativa», escribió el diputado y coordinador general de Primero Justicia.
El diario estadounidense New York Times publicó este jueves una carta realizada por el coordinador nacional de Primero Justicia y diputado a la Asamblea Nacional Julio Borges, quien respondió al artículo de Nicolás Maduro publicado el pasado martes por este rotativo en donde se refiere a la situación del país y la distorsión de la protesta venezolana.
A continuación la publicación en español de la respuesta de Borges a las declaraciones de Maduro.
Quiero contestar al artículo: “Venezuela: Un Llamado a la Paz” por Nicolás Maduro: Para que un diálogo sincero ocurra en mi país, el Sr. Maduro debe primero comprometerse a respetar los derechos humanos de los venezolanos, los cuales han sido atropellados en este pasado mes de protestas. Maduro debe ordenar a los colectivos armados por el gobierno a detener sus ataques a los manifestantes e instruir a la Guardia Nacional a detener el uso de la violencia. Los manifestantes detenidos y presos políticos deben ser liberados.
El Sr. Maduro tiene que reconocer la raíz del descontento social: la caótica situación económica y de inseguridad, al igual que la politización de las instituciones democráticas venezolanas. Esto requiere una mayor cooperación con el sector privado y otros actores para detener la inflación rampante, la escasez de alimentos y medicinas, y la creciente inseguridad.
También se requiere un proceso transparente e imparcial para renovar la Corte Suprema de Justicia, el Consejo Nacional Electoral y otras instituciones democráticas las cuales se han convertido en brazos del partido de gobierno.
Le pedimos a la comunidad internacional que sea solidaria con nuestros esfuerzos y que ayude al gobierno a entender la importancia de tener una transformación significativa.
La oposición venezolana está lista para unir al país, pero para realmente reconstruir a Venezuela en un país unido y próspero, el gobierno necesita mostrar que está listo para adoptar cambios estructurales.
NP