*** La hija del “Puma” José Luis Rodríguez y la siempre polémica Lila Morillo, se ha hecho un nombre propio en el firmamento artístico nacional e internacional
Lilibeth Rodríguez Morillo nació en Caracas, el 12 de junio de 1969. Archiconocida desde pequeña por ser la hija menor de los astros Lila Morillo y José Luis Rodríguez «El Puma». Se inicia como actriz en la telenovela Maribel junto a su inseparable hermana Liliana y su mamá Lila. Desde ese momento adopta el apellido materno para proyectarse como artista.
Su primer protagónico llega en 1994, el cual la lanza al estrellato. Fue en la telenovela de RCTV “Pura Sangre” junto a Simón Pestana -remake de la exitosa producción La Fiera-. Allí personificó a Corazón Silvestre. Posteriormente estelarizó otras telenovelas como: María de los Ángeles, La niña de mis ojos, Enséñame a querer, Viva la Pepa, Redención de amor, Alma Indomable, El amor las vuelve locas y más recientemente, Mi ex me tiene ganas.
También participó en exitosos dramáticos como: Por estas calles, Enamorada, Mundo de Fieras y La viuda de blanco.
También canta y compone
A la par de sus impecables actuaciones, Lilibeth Morillo ha demostrado excelentes dotes como cantante y compositora. Representó a Venezuela en el Festival OTI de la canción con un tema compuesto por su madre en la edición 1990, celebrado en el Cirkus Maximus del Caesar’s Palace de Las Vegas. Sus composiciones han sido disfrutadas y algunas han identificado la historia en producciones como: La viuda de blanco, El amor las vuelve locas y Mi ex me tiene ganas. Ha brillado en varias ediciones de Miss Venezuela y ha tenido participaciones estelares en Mister Venezuela, La gala de la belleza y Súper Sábado Sensacional.
Alejada de escándalos
Como animadora se ha destacado, primero en RCTV junto a Carolina Perpetuo en Estudio 92 y luego en Televen, en el programa Camino a la Fama. Es una de las figuras más versátiles y talentosas que tenemos en nuestro medio artístico. Su impecable carrera ha estado alejada de los escándalos, solo la ha salpicado las diferencias con su famoso progenitor, luego de la separación de Lila Morillo y su posterior matrimonio con Carolina Pérez. Ella ha confesado públicamente, que ha pesar de ello, él nunca dejará de ser su padre y que lo sigue y seguirá admirando, hecho que demuestra la calidad humana de la hermosa artista.
Ella se merece este ¡Qué Momentos! por haber sabido brillar sin la luz de sus progenitores, por su innegable talento, que ha puesto de manifiesto en su carrera profesional, la cual cumple dos décadas de brillo y éxito nacional e internacional
¡QUÉ MOMENTOS!
Diego Kapeky
Twitter: @diegokapeky