Dayana López indicó que no es la primera vez que «desde el departamento de recursos humanos se actúa de forma arbitraria contra el personal», por lo que pide revisión de su caso. Afectada no ha recibido pago de sueldo ni de bono vacacional
En pie de lucha se mantiene una madre soltera, quien de forma reciente fue suspendida de sus funciones en el Grand Hotel de la ciudad de Guatire, en el estado Miranda, empresa para la que ha estado trabajando desde hace 5 años de manera ininterrumpida según la información que aportara.
A los fines de sentar un precedente y para que su caso no pase «por debajo de la mesa», Dayana López, titular de la cédula de identidad V-17.119.687, se acercó a las oficinas de La Voz en donde planteó una serie de acontecimientos que a su juicio pudieron haber desencadenado molestias desde el departamento de recursos humanos, el cual habría actuado ilegalmente en contra de la mujer.
López explicó que el pasado sábado 13 de septiembre llegó a Grand Hotel, en donde se desempeña en el oficio de camarera, sin esperar que desde vigilancia le indicarían que no tenía permitido el acceso y que se encontraba suspendida.
«Todo ello, me imagino yo que surge a raíz de que el día anterior, es decir, el viernes 12, nos quisieron retener a la hora de la salida. El personal del que formó parte labora desde las 7:00 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde. Pero por órdenes de la sub gerente de recursos humanos, Blanca Viña, debíamos esperar hasta las 4:10, sin razones aparentes y justificadas, salvo que esa era su voluntad. Soy madre de tres niñas, por lo que no podía esperar ni un minuto para irlas a buscar a donde me las cuidan. Dí la vuelta hacia el estacionamiento para poder salir, pues ya había cumplido con mi jornada laboral. Eso molestó a la señora Viña y creo que eso la llevó a indicar que no podía entrar más», explicó López.
Exige revisión del caso
La denunciante agregó a sus declaraciones que en los 5 años que lleva trabajando en el Grand Hotel, ha sido testigo de episodios en los que los empleados terminan siendo las principales víctimas. Dijo que no se respetan normas de seguridad y que las condiciones laborales van contra las leyes establecidas por el Ipsasel. A ello se suma el presunto atropello propiciado por jefes y supervisores, quienes no dan derecho a reclamo alguno de los trabajadores.
«No es la primera vez que esto pasa. El modus operandi es que, si haces algo que genera molestia, dejan dicho con el vigilante que no puedes entrar. Eso le da espacio a ellos para que ante la inasistencia de trabajador, ellos interpongan una calificación de despido. Cuando los llaman a la Inspectoría te hacen quedar como un loco. Hoy soy yo la víctima, pero tiene que quedar claro lo que viene pasando, No he recibido nada por escrito hasta los actuales momentos, por lo que el despido no es oficial. Ya me amparé ante la Inspectoría de Trabajo, dado que ni pagan el sueldo y tampoco he recibido el bono de vacaciones, tomando en cuenta que el lunes 15 de septiembre me iba de vacaciones. Exijo revisión del caso y justicia, debido a que han sido 5 años de trabajo que no se botan así de fácil», culminó Dayana López.
Yohadi Arteaga
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