La investigación de cómo el Vuelo QZ8501 de AirAsia terminó en el fondo del Mar de Java involucra recuperar los cuerpos, acceder a los registros de datos del vuelo y mapear meticulosamente dónde se encontraron los escombros para reconstruir su trayecto.
Un funcionario de búsqueda y rescate indonesio dijo a CNN que cree que el material detectado por el equipo sonar en el agua es del vuelo QZ8501 de AirAsia.
Entonces, ¿qué ocurrirá después?
Prioridades
La primera prioridad es recuperar los cuerpos y regresárselos a sus seres queridos, dicen las autoridades indonesias. Los helicópteros bajan buzos para recuperar los cuerpos y escombros de la superficie del agua.
Los cuerpos dan pistas sobre lo que ocurrió en el vuelo, con base en dónde se encuentran y su condición. Por ejemplo, agua de mar en sus pulmones sugeriría que las personas a bordo pudieron estar conscientes cuando el avión golpeó el mar.
Hay una atención particular en la ubicación de los cuerpos y varios escombros.
David Soucie, un exinspector de seguridad de la Administración Federal de Aviación y analista de CNN, lo explica como “pelar una cebolla y juntar esa cebolla desde el interior hacia fuera”.
Los investigadores mapean los escombros encontrados en la superficie del agua. Dijo que después tienen que buscar otras piezas en el siguiente nivel del mar para encontrar más pistas.
“Así que podrías bajar 15.2 metros más o menos, para ver si hay escombros flotantes allí. Y seguir yendo hacia abajo y mapearlo mientras bajas. Ves cómo se fue a la deriva y cómo se movieron las piezas del avión”.
Durante la investigación del Vuelo 447 de Air France, se tomaron más de 150.000 imágenes del sitio de destrucción del avión en el Océano Atlántico.
Fue importante “ponerlas juntas” para darle a los investigadores una vista comprensiva del sitio de destrucción, dijo David Gallo, quien colideró la búsqueda después de que el jet francés se estrellara en 2009.
Registradores de datos
La clave para entender lo que ocurrió probablemente esté en el registrador de voz de la cabina del avión y el registrador de datos de vuelo, comúnmente conocido como caja negra.
Si se recuperan, las autoridades indonesias designarán qué agencia debe abrir y descargar la información. Las cajas negras, que en realidad son naranjas, están ubicadas en la cola para los Airbus 320-200.
El registrador de voz de cabina recolecta audio de los micrófonos y varios canales de los pilotos.
«Recoge otros sonidos como clics, cosas que salen mal, ruidos sordos, granizo. Puedes escuchar eso en el parabrisas”, dijo Mary Schiavo, una abogada y exinspectora general del Departamento de Transportes de Estados Unidos.
Los expertos en acústica pueden revisar el audio para intentar determinar el significado de cada clic y sonido.
El registrador de datos tiene cientos de piezas de datos como velocidad aérea, altitud, si la nariz del avión estaba hacia arriba o hacia abajo y a qué dirección se dirigía. Todos esos datos se imprimirán en hojas grandes, casi como electrocardiograma, que las autoridades utilizarán para juntar una línea del tiempo del vuelo.
Debido a que el avión de AirAsia solo tenía seis años, su registrador de datos es bastante moderno y contendría muchos parámetros, dijo Schiavo.
Retos en la búsqueda
Aunque el avión está en aguas mucho más superficiales que en las que se cree cayó el Vuelo MH370 de Malaysia Airlines, los equipos de búsqueda enfrentan retos. La naturaleza ciertamente no ayuda.
“El problema que el equipo de búsqueda ahora enfrenta es la temporada de monzones”, dijo Eric van Sebille, oceanógrafo en la Universidad de New South Wales en Australia.
“Este avión no pudo haber caído en una peor época del año. Hay fuertes vientos, olas agitadas. Estos mares superficiales son conocidos por olas complicadas. Es realmente difícil de trabajar”.
Esto podría poner a los equipos de búsqueda y rescate en riesgo y disminuir la visibilidad. También trabajan bajo una fecha límite ya que los sistemas de ubicación del avión, o guías de ubicación submarinas, solo duran aproximadamente 30 días.
Operación de salvamento
Las operaciones de salvamento para levantar los escombros son complicadas, pero el proceso se ha realizado en lugares más profundos que el fondo del Mar de Java, que aproximadamente tiene 43 metros de profundidad.
La Marina de Estados Unidos salvó pedazos del Vuelo 800 de TWA, que se estrelló en Nueva York en 1996, de profundidades de entre 35.05 a 39.6 metros. En 1998, los funcionarios canadienses levantaron pedazos del Vuelo 111 de Swiss Air de profundidades de 54.8 metros, en la costa de Nueva Escocia.
Los vehículos submarinos, diseñados para operaciones de salvamento de agua profundo, pueden descender hasta 6,096 metros. Pudieron recuperar objetos más pequeños como el registrador de datos del vuelo.
Debido a que solo pueden cargar hasta unos 1.800 kilogramos, piezas más grandes, como el fuselaje serían conectadas a un cable y jaladas a la superficie por una grúa en un barco. Esto se hizo para recuperar restos del fuselaje del Vuelo 447 de Air France.CNN