A una semana de la denuncia realizada por familiares, los entes asignados para la investigación solo han logrado conseguir casquillos de bala, ropa ensangrentada, zapatos y billeteras
Sin respuesta alguna se encuentran los familiares de los mineros desaparecidos en Tumeremo, en el municipio Sifontes al sur del estado Bolívar. Hasta ayer, los funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana no habían logrado avanzar mucho en la investigación.
La tristeza, la rabia y el dolor continúan latentes en los habitantes de la zona, por cuanto pasan los días y no obtienen respuesta alguna por parte de las autoridades.
“Fíjate, van más de cinco días y aún nuestros familiares no aparecen; qué es lo que están ocultando, por qué no aparecen, tienen que investigar bien, porque aquí hay algo más que no nos quieren decir, por lo menos queremos darles cristiana sepultura; son seres humanos y no animales.
El gobernador no nos ha dado la cara y mandó a la Guardia para que nos sabotearan la protesta, qué pretende él con todo esto”, apuntó una dama que prefirió mantenerse bajo anonimato por seguridad a su vida y la de sus familiares.
GNB arremete
contra protesta
A eso de las 2:30 de la madrugada, un grupo de militares llegó a la Troncal 10 de la población Tumeremo con un solo objetivo: levantar la tranca y normalizar el libre tránsito. Lo que inició el pasado viernes como medida de presión para el Gobierno y los entes investigadores, la noche del pasado jueves se convirtió en una odisea más para estas personas.
Los funcionarios castrenses levantaron a la fuerza la tranca y arrojaron la pancarta con los nombres de los desaparecidos al suelo, burlando el dolor de los parientes de los mineros desaparecidos.
Habitantes de Tumeremo expresaron al Diario La Voz que se sienten burlados por parte del Gobierno y las autoridades policiales, porque hasta ahora no han realizado una investigación profunda de los hechos.
“Cómo es posible que ya van siete días y no nos den una respuesta concreta, ahora están culpando paramilitares; esto es absurdo, son nuestros nuestros seres queridos que se encuentran desaparecidos, a estas alturas ya deben estar muertos y nadie hace nada por dar con ellos”, dice una mujer cuyo esposo no llega a casa desde el viernes.
Piden justicia
A una sola voz, los habitantes de la entidad exigieron justicia para los 28 desaparecidos, responsabilizando de estas muertes a un sujeto apodado “El Topo”, quien presuntamente cegó la vida de los inocentes el pasado viernes.
“Lo que queremos es que este hecho no quede impune, porque aquí han ocurrido tantas desgracias y todo queda engavetado; pasan a la triste historia del olvido y más nunca se habla del tema, aquí tienen que investigar bien quien fue el culpable y este tiene que pagar por lo que hizo”.
Asimismo, reiteraron el llamado a las autoridades que investigan el caso, para que le den mayor celeridad al proceso y ofrezcan respuestas de una vez sobre este caso.
n Henderson Pérez / Enviado Especial
@hendersonprensa