La impresión y el nerviosismo mataron a Belisario José Matute Periche, de 68 años. Los delincuentes que lo sometían al confirmar su deceso lanzaron su cadáver en una trilla, en la calle 81 del barrio Nelson Mora, parroquia Antonio Borjas Romero. Se presume que murió de un paro cardíaco.
Un hijo recordó que Matute llevó, el miércoles a las 6.00 de la tarde, unos pasapalos a casa de un familiar, en Monte Bello. Allí decidió ir a su casa en su Chevrolet Spark, y luego regresar a la reunión. Se presume que cuando estacionaba el vehículo, unos desconocidos se le acercaron a la ventanilla y lo apuntaron.
Bajo amenaza de muerte lo ruletearon por unos minutos, pero en el camino a Belisario se les infartó.
Unos vecinos notaron cuando los delincuentes tiraron a las 7.00 de la noche, el cadáver de su víctima. Llamaron a la Policía, la cual no tardó en llegar.