Los contrabandistas han cambiado pesos por bolívares para adquirir productos subsidiados por el Estado venezolano y bachaquearlos en su país
Un par de meses atrás, un grupo de mujeres vestidas de blanco traspasó la frontera colombo-venezolana para supuestamente comprar alimentos. Y los medios privados estuvieron prestos para crear un falso hecho noticioso: allá la comida es más costosa que acá. El objetivo de estas corporaciones mediáticas, darle sustento a la matriz de opinión de la crisis humanitaria en Venezuela.
Luego, en días recientes, aunque hasta hace poco se había estabilizado, se disparó nuevamente el dólar paralelo. Su principal referencia es el precio en pesos del bolívar en zona fronteriza con Colombia, determinado por la oferta y la demanda, ya que no existe el control de cambio. Entonces, de cómo se cotice la transacción del peso a bolívar, se calcula el llamado Dólar Today.
Lo anterior tiene su marco legal debido a la resolución promulgada en el año 2000, Art. 70, bajo la presidencia de Andrés Pastrana, mediante la cual se autoriza la compra y venta de divisas. Y de ahí que se pueda fijar el valor del bolívar en pesos, desmarcando la moneda colombiana del dólar en cuanto a su tasa oficial cambiaria.
Los contrabandistas han cambiado pesos por bolívares para adquirir productos subsidiados por el Estado venezolano y bachaquearlos en su país. Por ende, con el contrabando de extracción y la devaluación de nuestro bolívar, resultado de la falsa cotización de este dólar de guerra, han atacado la economía nacional.
La moneda venezolana no puede seguir negociándose en suelo colombiano. Esto desangra nuestro país con la venia del gobierno neogranadino. Es oportuno recordar que también saboteaban con los billetes de a cien, sacándolos fuera de aquí, para un fin semejante. Quien quiera bolívares que los cambie acá por dólar.
En resumen, como Colombia no produce y es incapaz de garantizar una vida digna a sus ciudadanos, cargamos con esto y con la «legalidad» del Dólar Today, o mejor del peso “today”.
Isabel Rivero De Armas
aporrea.org