De “indignante” lo calificó el DT Rafael Dudamel. Y centenares de mensajes circularon por las redes, mientras el horizonte se nublaba para la selección venezolana que disputa en Ecuador el Suramericano Sub-20 al perder 1-0 ante Brasil con gol a los 89 minutos y luego de un encuentro bastante parejo, en el cual los amazónicos tuvieron más el balón pero las ocasiones fueron compartidas. Un discurrir, mediatizado por las continuas faltas.
El encuentro, correspondió a la expectativa. Un Brasil que se consideraba eliminado de no puntuar –y no contaba con dos titulares, suspendidos- puso todo su buen manejo en la búsqueda de vulnerar a una defensa que ha sido brillante a lo largo de la justa. Los venezolanos, sin tanta premura, supieron hacer su juego, corrigiendo errores iniciales en la marca que incluso condujeron a un remate en el horizontal del marco de Wuilker Angel y también crearon oportunidades, la mejor desperdiciada cuando disparo de Yangel Herrera pegó el vertical izquierdo.
Se presentía el empate cuando Felipe Vizeli forcejeó con Herrera por una posesión y dominó por la fuerza, con un agarrón que desequilibró al venezolano. Este, ingenuamente, volteó a quejarse al árbitro mientras el brasileño avanzaba un par de pasos y soltaba un cañonazo imparable. Un golazo. Allí terminó el invicto venezolano.
Lo de esa jugada fue apenas una de las pifias menores del juez peruano Diego Aro, cuya actuación dejó mucho que desear y –sin objeción al disparo de gol- perjudicó sensiblemente al elenco vinotinto. Una tarjeta sin motivo, golpes obviados y faltas desestimadas o castigadas en medio de grandes dudas, generaron un final con serias protestas y otras cartulinas –una roja para Heber García-, que dejan complicado al equipo venezolano para el próximo compromiso, ante Uruguay. Que como el siguiente y el último, ante Argentina, tiene carácter decisivo pues se registra un empate a 4 puntos entre los nuestros, Ecuador y Brasil.
-Armando Naranjo-