«A finales de marzo, en una operación de control territorial (…) se ubicó un gran depósito ilegal de armamentos que pertenecían al extinto ya Frente 48, que operaba en el sur del país”, informó en rueda de prensa el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas
El gobierno de Colombia reportó este jueves la incautación de un «importante» arsenal atribuido a las FARC, que implementa un acuerdo de paz para superar más de medio siglo de conflicto armado, un «hecho que mina la confianza» entre las partes, según la guerrilla.
«A finales de marzo, en una operación de control territorial (…) se ubicó un gran depósito ilegal de armamentos que pertenecían al extinto ya Frente 48 de las FARC», que operaba en el sur del país, informó en rueda de prensa el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
El arsenal fue hallado en el amazónico municipio de Puerto Leguízamo, en el departamento de Putumayo, fronterizo con Perú y Ecuador.
Villegas indicó que «en esa caleta», actualmente en custodia de la policía, se encontraron «54 fusiles, seis ametralladoras, dos subametralladoras, tres lanzagranadas, tres morteros, 15 granadas, 100 kilos de pentolita, 200 minas antipersona, 16.500 municiones, 3.600 detonadores eléctricos, 32.500 metros de cordón detonante y 16.000 cartuchos».
«Es uno de los depósitos de armas más importantes que hayan sido incautados por la fuerza pública», señaló.
El hallazgo fue cuestionado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), que tras cuatro años de negociaciones en Cuba firmó en noviembre un acuerdo de paz con el gobierno de Juan Manuel Santos.
Su jefe máximo, Rodrigo Londoño («Timochenko»), lo definió en Twitter como un «hecho que mina la confianza construida durante estos años de negociación e interacción» entre FARC y Fuerzas Armadas.
En el marco del pacto, las FARC se concentran en 26 zonas del país donde a más tardar a finales de mayo deben haber dejado las armas y comenzado su paso hacia la vida civil y transformación en un partido político legal, un proceso bajo supervisión de la ONU.
«Hay 900 caletas listas a recoger junto con ONU. Cronograma (de) recogida se va a retrasar por incumplimientos del gobierno», apuntó Londoño en otro tuit.
En el acuerdo se establece el registro, identificación, marcación, dejación y destrucción de armas de la guerrilla.
El armamento de los casi 7.000 combatientes agrupados en las zonas de concentración es almacenado en contenedores de la ONU y luego será fundido para construir tres monumentos.