El comisario Douglas Rico, director del Cicpc, fue el encargado de informar sobre el caso perpetrado en una zona rural del municipio Páez, en donde el cuerpo de la víctima fue localizado por los pesquisas de este organismo que dieron con la captura de quien se señala así mismo como el responsable de todo
Luisana Molina / Yohadi Arteaga / Diario La Voz
Un dantesco hecho generó noticia y conmoción este jueves, luego de que fuesen localizados los restos óseos de un hombre de 49 años de edad, en las adyacencias de una vivienda sin número ubicada en el sector Las Marías, parroquia Río Chico, municipio Páez, del estado Miranda.
La información fue dada a conocer por el comisario Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), quien a través de las redes sociales hizo referencia a la aprehensión del responsable del homicidio. Se trata de un sujeto identificado como Luis Alfredo González Hernández. Éste último habría confesado no sólo ser el autor material del suceso, sino que además explicó a las autoridades los motivos que lo llevaron a cometer este delito.
El «Artista Caníbal»
De acuerdo a los detalles que suministró Rico, los funcionarios adscritos al cuerpo policial que dirige iniciaron una serie de averiguaciones, a razón de que vecinos de la referida zona rural de Río Chico les extrañaba no haber visto a la víctima desde hacía dos meses, al tiempo en que les generaba suspicacia la actitud de Luis Alfredo González durante este tiempo.
Las investigaciones trajeron resultados: los restos óseos de Lisandro Rosales García, como quedó identificado el hoy occiso, fueron localizados enterrados en el jardín de la casa.
Su atacante, una vez detenido por los efectivos de la subdelegación de San José de Barlovento, confesó ser el asesino de Rosales García. Dijo en medio del interrogatorio que lo mató, lo desmembró y comió luego parte de su humanidad, dejando el resto a un lado para enterrarlo.
El «comegente» explicó además que al parecer, Lisandro lo había contratado para lo que llamó un «servicio funerario», el cual consistía en darle muerte y hacer uso de su sangre y cenizas para hacer pinturas.
En la finca fueron hallados aparte de los restos humanos que fueron levantados por el médico forense de guardia en el Cicpc, los cuadros elaborados por el «artista caníbal», como fue reconocido el autor del homicidio, quien según el testimonio que dio una vez interrogado, cumplió con la voluntad de su víctima. Hizo las pinturas y en una de ellas inclusive se pueden percibir las letras «LR» que son las iniciales de Lisandro Rosales.
Las investigaciones continúan a los fines de confirmar la versión de Luis Alfredo González, o bien saber si hay otro móvil y esclarecer el caso.