Lionel Messi consiguió un hat trick en la victoria sobre el Ajax por 4-0. Atlético de Madrid y Nápoles también ganaron
Leo Messi aceptó el desafío de Cristiano Ronaldo y, con otro triplete, llevó a la goleada al Barcelona ante el Ajax (4-0), en el estreno en la Liga de Campeones, que contempló el regreso triunfal a la competición del Atlético de Madrid y el Nápoles de Rafael Benítez y el inesperado tropiezo en Stamford Bridge del Chelsea de Jose Mourinho ante el Basilea.
El Dortmund, que el pasado año acabó invicto la fase de grupos, encajó, a la primera, una derrota. El Arsenal y el Milan salieron vivos de la sesión.
El Barcelona ya tomó el mando de su grupo. En el histórico duelo ante el Ajax goleó liderado por Messi. Las diferencias entre ambos clubes son ahora abismales. Sólo el historial los aproxima. Nada tienen que ver el potencial de uno y del otro. El conjunto de Amsterdam hace años que no pasa de ser un comparsa en Europa.
Con Xavi en el banquillo, Messi marcó tres de los cuatro tantos. Iguala a Cristiano Ronaldo como goleador, que el martes hizo otros tres. Gerard Piqué completó la cuenta y Víctor Valdés detuvo un penalti.
El conjunto azulgrana comparte el liderato con el Milan, que salió airoso de la visita del Celtic. En cuatro minutos del tramo final el conjunto de Massimiliano Allegri encontró solución a las dudas con los goles del colombiano Cristian Zapata y del ghanés Sulley Ali Muntari (2-0).
El Atlético Madrid tuvo un reencuentro soñado con la competición. Dejó en evidencia al Zenit San Petersburgo (3-1), que cuando quiso reaccionar ya se encontró con un rival asentado en la competición. El brasileño Joao Miranda marcó el primer gol rojiblanco en el torneo. Su compatriota Hulk, de un disparo potente y lejano, logró el empate en la segunda mitad.
El turco Arda Turan y el brasileño Leo Batistao ejecutaron la reacción del cuadro de Diego Simeone, que prolongó el entusiasmo de la Liga a la competición continental.
El argentino Lucho González proporcionó al Oporto el triunfo en el campo del Austria Viena (0-1), para perfilar las expectativas en el grupo, a las que pujará con el equipo español.
El fracaso del Chelsea fue lo más llamativo de la sesión. Fue sonrojado por el Basilea, un equipo destinado a un papel secundario en el torneo. El cuadro londinense, sin representante español alguno en su once inicial, tomó ventaja por medio del brasileño Óscar al borde del intermedio.
El equipo de Mourinho, maestro en gestionar un marcador, se deshizo en el tramo final. El egipcio Mohamed Salah obtuvo el empate y el Chelsea se desquició.
Marco Streller, a pase del argentino Matías Delgado, anotó el segundo tanto helvético. Un premio que no esperaba el Basilea y un paso atrás del bloque londinense.
El Schalke 04 no perdonó y ganó con autoridad al Steaua Bucarest (3-0). El japonés Atsuto Uchida, el ghanés Kevin-Prince Boateng y Julian Draxler llevaron el primer triunfo al cuadro germano.
El Nápoles de Rafael Benítez prolongó en Europa las excelencias que mostró en el arranque del curso. Tumbó a la sensación del curso pasado. El Borussia Dortmund, que antes del descanso quedó con un jugador menos, por la expulsión del meta Roman Weidenfeller, enviado a la grada igual que el entrenador Jurgen Klop.
Para ese momento el argentino Gonzalo Higuaín ya había puesto por delante al equipo napolitano, que marcó el segundo en el 67 con una falta maestra de Lorenzo Insigne. Un gol en propia puerta del colombiano Camilo Zúñiga afeó el triunfo italiano (2-1).
Finalmente, Theo Walcott, que aprovechó un garrafal error de la zaga rival, y Aaron Ramsey, llevaron al Arsenal a la victoria en Marsella, que acortó distancias en el último minuto con un penalti transformado por Jordan Ayew (2-1).
foto Barcelona’s Lionel Messi, right, scores 4-0, and his third goal in the match, passing defender Ajax’s Christian Poulsen/AP Photo/Emilio Morenatti
La magia de Messi fue el soporte del Barcelona este miércoles en el triunfo ante el Ajax por 4-0
AP / Emilio Morenatti