El coprotagonista mexicano de la exitosa telenovela Dulce Amargo, transmitida por Televen de lunes a sábado a las 9 de la noche, Fernando Noriega, dice sentirse a gusto trabajando en Venezuela y asegura que lo más fácil de adaptarse al país, fue encontrar un grupo de gente con ganas de trabajar y de hacer las cosas bien.
Claro en la película… ¡Diego es Diego!
El villano del exitoso dramático Dulce Amargo, se instaló en Venezuela para asumir el rol de Diego Piquer, un médico que mostrará una obsesión enfermiza por Mariana -Scarlet Ortiz-. Diego, tiene 32 años de edad y trabaja junto a Mariana y su novia Mafe -Aileen Celeste- en una sala de emergencias. Se siente cómodo con su relación y su trabajo, pero la presencia de Mariana le inquieta. Se obsesiona por ella y dará lo que sea por tenerla y hacer realidad esa fantasía que crece día a día.
Fernando, viajó a México estas navidades para pasar un tiempo junto a sus seres queridos y afirmó que lo primero que hará al bajar del avión será: “comer algo súper mexicano”. Asegura haber probado su primera hallaca y organizó una cena de despedida para compartir con todo el elenco de Dulce Amargo “Hicimos una cena navideña y mandamos a hacer hallacas para compartir todos. Ha sido buenísimo porque la gente ha querido compartir y enseñarnos todas las tradiciones navideñas de Venezuela”.
¿Habías interpretado un personaje como Diego anteriormente? ¿Ha sido difícil la parte de darle vida a un médico obsesionado?
Es la primera vez que interpreto algo así. Sí ha sido complicado porque al ser la primera vez que hago de contrafigura como actor, pues aún no estoy acostumbrado a que la gente responda negativamente acerca de mi trabajo. Ha sido difícil acoplarme a eso y entender que es parte del efecto que el personaje tiende a causar. Por otro lado la construcción del personaje también ha sido complicada y ha sido muy bueno que me estén dando la oportunidad de aportarle creativamente al personaje para no caer en el cliché del villano que tiene malas intenciones y las muestra. Ha sido para mí, muy interesante guardar en la intimidad del personaje, las malas intenciones que tiene.
¿Para la preparación de tu personaje Diego Piquer, requeriste hacer algo en especial?
No, en realidad me basé en vivencias personales, en adoptar ciertas actitudes de gente que uno va conociendo y que me parecen extrañas. (Ríe) Ha sido eso, más algunas referencias de películas, de trabajos de otros actores, que he ido viendo, para poder darme una idea de qué es lo que quería hacer con este personaje.
Entre el bien y el mal
Todos tenemos un lado bueno y un lado malo. ¿Tiene Fernando algún lado malo como el de Diego?
Trato generalmente de estar del lado bueno, (carcajadas). Soy una persona muy pacífica, trato de no meterme con nadie, soy muy paciente, me cuesta estar del lado malo porque soy muy paciente, aunque al ser tan paciente y al dejar pasar por encima de uno muchas cosas, puede desatar mi lado malo. Me ha pasado varias veces, y definitivamente no me gusta, pero mi lado malo sale después de que la gente cruzó la barrera una y otra y otra vez, cuando mi paciencia se termina, sale mi lado negativo.
¿Qué diferencia hay entre la forma de hacer telenovelas en México a la de aquí?
Puede ser un poco el ritmo de trabajo, ha sido un poco más lento, es una novela complicada de realizar, que lleva muchos decorados. Esa es una de las diferencias que noto y prácticamente nada más.
¿Qué es lo que más extrañas de México?
¡Uy la comida…! ¡Muchísimo!
Admira a nuestra Scarlet Ortiz
¿A qué le teme Fernando?
Trato de no enfocarme mucho en eso, me gusta disfrutar la vida y no llenarme de temores. La gente se paraliza cuando tiene miedos. Muchas cosas de las que he logrado, no las hubiese hecho si enfocara mi energía en las cosas a las que les temo. A la muerte creo que todos tenemos un cierto temor, más por el hecho que finalmente es algo natural, a lo desconocido.
¿Qué personaje de Dulce Amargo admiras? ¿Ese que piensas que lo está haciendo excelentemente bien?
Admiro mucho el trabajo de Scarlet, creo que le tocó un personaje complicado y lo está haciendo fantástico y personalmente admiro el personaje de Nicolás (Erik Hayser), es un poco hacia donde yo me visualizo como persona. Al tener estabilidad, ser buen esposo, buen padre, un ciudadano respetable.
¿Qué te falta por hacer?
Quiero hacer muchas cosas. Seguir enfocándome en mis proyectos en Estados Unidos, ahí hay un camino por recorrer. Cine independiente y seguir revisando proyectos en Latinoamérica, en México o donde se me presente.
¿Qué hace Fernando cuando no está grabando?
Trato de hacer ejercicio, de comer sano, de hacer todas las cosas que me quedan pendientes por estar trabajando. Hablo con mi familia, me gusta estar tranquilo y descansar para dar lo mejor de mí en el momento que tenga que estar en el set.
¿Qué hay después que termine Dulce Amargo?
Primero tomarme unas vacaciones. Poder disfrutar a mi familia por lo menos un mes y después regresar a Los Ángeles a seguir tocando puertas.
Diego Kapeky
@diegokapeky