Marinos de Anzoátegui es el favorito, pero Gigantes de Guayana y Guaiqueríes de Margarita cuentan en la temporada de la Liga Profesional de Baloncesto que inicia este viernes
Hay optimismo por los lados de Oriente, donde moran tres de los diez equipos protagonistas de la temporada 2013 del baloncesto profesional. Y hay razones para ello, pues no solo el campeón Marinos de Anzoátegui, sino también Gigantes de Guayana y Guaiqueríes de Margarita se han estado preparando organizadamente y cuentan con planteles como para plantearse objetivos más allá de la postemporada.
Cada uno dentro de sus características, todos con respaldo de una afición entusiasta que suele copar las localidades, son rivales a tomar en consideración, pues sin moverse todavía el balón presentan las piezas necesarias para el éxito.
Marinos
De sobras conocida es la fortaleza del «Acorazado», basada en un plantel criollo logrado a base de trabajo de formación y buen manejo gerencial en los cambios, así como su pupila para la contratación de importados. Hace un año ganaron luego de «darse el lujo» de transferir -en busca de más profundidad- a un baluarte como Héctor Romero.
Axier Sucre, Oscar Torres, Gregory y José Vargas, de vuelta Diego Guevara, Miguel Marriaga, Leonardo y Emilio Capparé, Ernesto Mijares, Raúl Orta, Junior Martínez, Gabriel Paul, Carlos Morris, Francisco Sanabria, Angel Contreras, Germán Gabriel, Gregory Curvelo, Juan Fontena, Humberto Bompart, Greimer Valero, Jesús Rodríguez, Javier Piñero, Julio Torrealba, Jesús Ríos y Leistin Figueroa son los criollos inscritos, además del «reencauchado» John Cox, activo en la liga francesa y quien, en las fases más duras, sería de gran ayuda.
Tres importados conocidos, el centro Devon Hardin (2,10) y los polivalentes León Rodgers y Clarence Mathews, que por su versatilidad serán muy valiosos en los esquemas de Jorge Arrieta, uno de los cuatro técnicos criollos de la liga y a quien asistirán los experimentados Henry Paruta y Gustavo García.. Con Sucre, los Vargas, Torres, Guevara, Marriaga, Mijares y Leonardo Capparé hay suficiente profundidad, al margen de lo que pueda aportar el talento emergente.
Tienen en la reserva a William Graves, Jameel Watkins, Curtis Stinson, Alfrie Kelley y Ryan Moss.
Gigantes
Su andadura en la LPB, todavía joven, ha mostrado progresos cada año. Siempre están un tanto mejor. Y ya se nota la evolución en el material nativo, requisito indispensable para llegar lejos. El torneo de «puros criollos» y el certamen preparatorio en Maturín dejaron evidencia de eso, que tiene entusiasmado al grupo que, en la cancha, maneja el ex NBA Carl Herrera, con Luis Jiménez y «Cheito» Ramos como asistentes.
En los comienzos, Gigantes enfrentará la ausencia de Paul Stoll y Andrew Feeley un tandem que por tres años ha sido básico en los esquemas porque reúne manejo, tiro a distancia y fuerza y calidad en los tableros. Sin embargo, cuentan con Rodney Alexander, Myron Allen y Marquis Jones, alero fuerte, base y alero con credenciales para hacer el trabajo.
Cuenta mucho el plantel criollo, que incluye al veterano José «Cheíto» Ramos, a Jorge León, Marlon Patiño, Daniel Macuare, Harold Cazorla, Peter Kvietek, Jorge Díaz, Martín Escobar, Elvis Báez, Rubén Contreras, José Bravo, Irvin Núñez, Albert Arias, Pedro Montaño, Jesús Brito, Derwin Ramírez, Luis Almarza, Gustavo Lucena, Randy Vásquez, Yader Fernández y Lennimer Seijas. Allí se amalgaman experiencia y juventud y en algunos casos fuerza y estatura. Herrera tendrá que hilar fino para, como en los años anteriores, sacarle provecho a ese recurso.
En la reserva de Gigantes figuran, además de Stoll y Feeley, Blake Walker, Camontae Griffin, Albert Harris, Woodfox Brooker y Julian Sensley.
Guaiqueríes
El año pasado La Tribu amenazó, pero se quedó corta. Ahora vuelve con ímpetu y, aunque perdió -razones personales- a un valor importante como Douglas Chiquito y sus rotas relaciones con César Silva caminan hacia un cambio, posee una base capaz de hacer peso. Eso sí, fue el equipo que inscribió menos personal criollo y no está clara la situación del cuerpo técnico pues no figuran los asistentes del año pasado, Iván García y Alfredo Caraballo, el primero de los cuales -se anunció oficialmente- «trabajará con las categorías menores».
Casey Owens, el DT -seguramente recomendará un asistente foráneo- cuenta, como base principal, con Tulio Cobos, Richard Lugo, Hernán Salcedo, Antonio Torcatt, César Silva, Edgar Arteaga y como Marinos inscribió a Diego Guevara, otra vez por lo visto «manzana de discordia». Carlos Rodríguez, Jesús Medina, Anderson y Ozman Morales, Yelfreis Berroterán, Leonardo Palacios, Gustavo Calderín, Leo Betancourt, Luis Maneiro y Michael Avila forman el respaldo nativo.
El fin de semana corrían rumores sobre la posibilidad de un cambio con Trotamundos, que incluiría a Silva y Salcedo por Rafael Pérez y Dennis D´Adezzio, que fortalecería el perímetro (debilitado sin «El Oso» ni Chiquito), pero sobre los importados recaerá un trabajo determinante. Comenzarán con Rodney White, Marcus Elliot, Mathew Feije, Antwan Wright, Chris Jackson y «el eterno» Roger Washington.
Dado el atípico inicio de temporada, muchos extranjeros están participando en otros campeonatos y por ello todos los equipos tienen en reserva jugadores probados en esta liga y que podrían incorporarse sobre la marcha.
De los tres orientales, Guaiqueríes es el que presenta ciertas incógnitas. Pero a no dudar que los tres estarán en la pelea.
Armando Naranjo
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