Miami Heat se metió en la historia de la NBA con sus victorias consecutivas. Los Ángeles Lakers asoman su opción a postemporada
Desde el 3 de febrero los Heat de Miami no saben lo que es perder. Ese día iniciaron ante Toronto una racha que ya va por 22 triunfos en fila, el último logrado el domingo ante los mismos Raptors, 108 por 91. Su marcha arrolladora no parece detenerse, como la suma de cifras por LeBron James, que en esa oportunidad llegó a su máximo de doble-dobles en una temporada, 32.
Esta vez -como compartiendo honores- fue Dwyane Wade el mayor notador de los campeones con 24 puntos, a los cuales agregó 9 asistencias. Pero Lebron puso otra marca personal al perforar las redes para 22 puntos, con 12 rebotes y, como frecuentemente cerca del triplete, 8 asistencias. Miami, de paso, siguió mostrando su colectivismo con cuatro jugadores en doble dígito anotador, los otros Ray Allen (20) y Chris Bosh (18), así como un 58% de cancha, con 45 en triples. Empataron la segunda cifra de éxitos consecutivos, pero les quedan todavía lejos los 33 que exhiben los Lakers del 71. Ruddy Gay anotó 27 para Toronto.
Dallas se la puso difícil a Oklahoma, pero no pudo con el martilleo de Westbrook y Durant. El base llegó a 35 puntos, con 19 en el primer cuarto y 14 en el tercero, el líder anotador sumó 31, con 19 en el último cuarto, cuando sus tiros seguidos desde todo ángulo demolieron el mano a mano que mantenían los Mavericks. Ibaka dobló con 16 y 18 Nowitzki metió 23 para la casa, pero no hizo un solo lanzamiento en el cuarto lapso.
Donde está interesante la lucha es en la parte baja de la clasificación del Oeste. Porque los Lakers ya están octavos y amenazan la séptima plaza. Sin Bryant, cuyo tobillo fue puesto en reposo, hubo colectivo para dar cuenta de Sacramento: Metta 22 (acertó los primeros 8 y terminó con 10 de 13), Jamison lideró con 27 y el dueto Howard-Nash estuvo letal, el primero con 12 y 17, el segundo con 19 y 12 asistencias, Blake metió 16 y Clark 11, lanzando el equipo para 56%.
Los Warriors le atizaron una paliza a los Rockets, en Houston, para adueñarse del sexto lugar. Curry (29 y 11 asistencias) y Thompson (26) bombardearon desde el perímetro y Bogut (12-12) mandó en los tableros, y una ofensiva con 46% de cancha y 13 triples para 50%, dieron la vía hacia un contundente 108-78. Y los Clippers no tuvieron problemas para mantenerse arriba, en el tercero, ganando 93-80 ante unos diezmados Knicks, con cinco en doble dígito encabezados por Chris Paul (20 y 8 asistencias).
En Brooklyn, Atlanta (Horford 22-11) superó 105-93 a los Nets, a pesar de 18 de Johnson y 22 rebotes de Evans, para darle calor a los puestos secundarios en el Este, mientras Milwaukee (Ellis 39, Jennings 14 asistencias) defendia su casa ante Orlando 115-109.
Greivis con 24
Los Timberwolves, que volvieron a contar con un productivo Derrck Williams (28), ganaron en los segundos finales, 97-95, a unos Hornets que otra vez fallaron en el cierre, aun con posesiones para nivelar. Los visitantes se vieron afectados por 24 balones perdidos y el venezolano concluyó 39 minutos con 24 puntos, pero precisó para ellos 25 lanzamientos (falló 3 de 5 triples y metió sus 2 tiros libres), agregando 7 rebotes, 5 asistencias y 6 pérdidas.
No impresionan
Permitan que Jason Terry les diga lo que piensa sobre la racha de 22 victorias en línea de el Miami Heat.
«No estoy impresionado con eso ni con nada de lo que hacen», dijo Terry, quien tiene un historial con Miami desde sus días con Dallas cuando los dos equipos se enfrentaron en las finales del 2011. «Así que, para mí, se trata más de lo que está haciendo muestro equipo y cómo nos vamos ensamblando como unidad».
Aunque pueda sonar tonto, Terry sugirió que los Celtics están más preocupados con ganar un poco de venganza de los inferiores Charlotte Bobcats que por la racha victoriosa expansiva que el líder del Este, el Heat, habrán acumulado durante su visita al TD Garden.
Con sus dos más recientes victorias de viernes y domingo, el Heat- que han eliminado a los Celtics en cada una de las pasadas dos postemporadas, incluyendo en siete partidos en las finales de la Conferencia del Este del año pasado- estarán empatados por la segunda racha victoriosa más larga en la historia de la NBA (22 juegos por los Houston Rockets del 2007-08) cuando visiten a Boston. Irónicamente, fue con este núcleo de Kevin Garnett y Paul Pierce en la cancha que los Celtics le rompieron la racha a los Rockets el 18 de marzo del 2008- a cinco años el día del encuentro de Miami-Boston.
Armando Naranjo /donarmandonaranjo@gmail.com /@DonArmandoN