No existen explicaciones de por qué el estelar jugador de cuadro dominicano se siente tan bien en el Progressive Field
Algo tiene Cleveland que Robinson Canó se siente como en su casa.
El astro dominicano ha conectado imparables en 11 partidos al hilo en Progressive Field datando del 17 de julio de 2010, acumulando una foja de 20 hits en 45 turnos, para un promedio de bateo de .444, conectando 10 dobles y 5 jonrones con 10 carreras remolcadas.
«Las cosas están saliendo, siento que estoy seleccionando mejor los strikes, pero no estoy haciendo nada diferente»,afirmó el dominicano, quien actualmente es uno de cinco Yankees de Nueva York bateando por encima de .300.
En los primeros seis partidos de la campaña, Canó, y el equipo en general, fueron blanco de duras críticas por la anímica ofensiva. El dominicano había conectado sólo 3 hits en 23 turnos, y los Yankees habían perdido dos series consecutivas, una en casa contra los Medias Rojas de Boston seguida por otra como visitantes ante los Tigres de Detroit.
Sin embargo, la marea pareció cambiar el último partido en Detroit el 6 de abril. Desde entonces, los Yankees han anotado 32 carreras, conectando 44 hits, entre ellos 9 jonrones, y al frente de toda esa imbatible ofensiva está el bate de Canó.
En los primeros dos partidos de la serie de cuatro contra Tito Francona y los Indios, Canó ha bateado para .700, con 7 imparables en 10 turnos. Su promedio de bateo actual es de .303& había sido de .130 después de los primeros seis partidos de la temporada.
Pero Canó se niega a hablar de logros personales, dándole pleno crédito sólo al balance final.
«Las cosas están saliendo, no sólo para mí, sino también para el equipo, y eso es lo importante», afirmó.
«Te llena de satisfacción tener un compañero que tiene el talento que tiene Robinson Canó, y lo pone en práctica -lo que hace se ve tan fácil- aunque no lo es», dijo el cerrador panameño Mariano Rivera tras el lapidario triunfo 14-1 de los Yankees sobre Carlos Carrasco y los Indios.
En cuanto a los impresionantes resultados de los últimos días en contraste con las bajas expectativas que hay para el equipo, Rivera advirtió que esta campaña apenas comienza.
«Hay mucha temporada todavía y nosotros no tenemos que tratar de taparle la boca a ninguno, los críticos siempre van a estar y nosotros lo que tenemos es tratar de hacer nuestro trabajo y jugar nuestra pelota», añadió Rivera.
Y aparentemente, con su total actual de 15 jonrones, efectivo para el mayor número de cuadrangulares de cualquier equipo en Grandes Ligas, muy por encima de las expectativas, hay pelota para rato en Nueva York.
Por Marly Rivera / espn.com
