La mayoría de las víctimas murieron aplastadas por enormes trozos de hormigón al desplomarse el edificio de ocho plantas el miércoles por la mañana, un horario en el que muchos de los talleres de confección de ropa se encontraban atestados de trabajadores
SAVAR, Bangladesh — Seis individuos fueron arrestados con relación al desplome de un edificio en Bangladesh en el que murieron al menos 348 personas, al tiempo que los rescatistas reconocieron que las voces de los sobrevivientes se escuchan más tenues tras cuatro días de estar atrapados.
A pesar de ello, 29 personas fueron rescatadas ayer, dijo Shahinul Islam, portavoz del ejército.
La mayoría de las víctimas murieron aplastadas por enormes trozos de hormigón al desplomarse el edificio de ocho plantas el miércoles por la mañana, un horario en el que muchos de los talleres de confección de ropa se encontraban atestados de trabajadores.
Ha sido la peor tragedia en el sector de la confección en Bangladesh —una de las principales fuentes de trabajo en este empobrecido país_, y atrajo la atención pública sobre las pésimas condiciones laborales de quienes trabajan por 38 dólares al mes en la elaboración de ropa para marcas internacionales de prestigio.
Entre los detenidos están dos propietarios de una fábrica de ropa, los cuales pueden ser interrogados por la policía durante 12 días sin que se les finquen cargos, según falló un tribunal de Daca. También están arrestados dos ingenieros del gobierno y la esposa del propietario del edificio —el cual está prófugo_, en un intento por obligarlo a que se entregue.
Ayer por la noche la policía arrestó al dueño de otra fábrica.
Rescatistas no paran
Laborando las 24 horas sin importar el calor ni la lluvia, los rescatistas llegaron finalmente el sábado hasta la planta baja desde la parte superior de la montaña de escombros, valiéndose de 25 angostos agujeros que han taladrado, dijo el general de brigada Alí Ahmed Khan, director de los bomberos.
«Aún estamos recibiendo respuestas de los sobrevivientes, aunque poco a poco se están escuchando más tenues», afirmó. Los rescatistas ya pueden ver los automóviles que estaban estacionados en la planta baja, agregó.
«El edificio es muy vulnerable. En cualquier momento podrían desplomarse los pisos. Estamos desempeñando una labor imposible, pero nos alegra que pudimos rescatar a tantos sobrevivientes», señaló.
Protestas violentas
Las manifestaciones violentas continuaban esporádicamente en Daca y se extendieron a la ciudad meridional de Chittagong, donde varios vehículos fueron incendiados