Las últimas dos veces que el alemán Norbert Poehlke disparó su pistola fue contra su hijo menor y contra sí mismo, pues se suicidó en 1985
“Acabó a tiros con la vida de tres hombres, su esposa y sus dos hijos, entre 1984 y 1985. Su última víctima fue su hijo menor, a quien asesinó en Brindisi, Italia”
Norbert Poehlke, mejor conocido como “El Asesino del Martillo”, fue un policía alemán, protagonista de diversos atracos y homicidios en Baden-Wurtemberg, Alemania. Acabó a tiros con la vida de tres hombres, su esposa y sus dos hijos, entre 1984 y 1985. Su última víctima fue su hijo menor, a quien asesinó en Brindisi, Italia.
La primera prueba de los asesinatos de Norbert Poehlke apareció el 03 de mayo de 1984, cuando la policía halló en una zona de descanso de la autopista cercana a Marbach a Siegfried Pfitzer, de 47 años, muerto por un disparo en la cabeza. Su automóvil fue encontrado medio kilómetro más adelante de donde se había hallado el cadáver. Las fuerzas policiales relacionaron el vehículo al robo de un banco en Erbstetten ese mismo día. El asesino había utilizado un martillo para romper la ventana del conductor.
Un mal policía
Norbert Poehlke nació el 15 de septiembre de 1951 en Stuttgart, Alemania. Fue un sargento policial encargado de una unidad de perros en Stuttgart-Mühlhausen. Quienes lo conocían lo consideraban muy afortunado, pues se ganó 30 mil marcos alemanes en la lotería, lo que representaba una buena cantidad de dinero a principios de los años ‘80.
Con este dinero, decidió empezar a construir una casa de campo para vivir con su familia. Sin embargo, se le fue de las manos el proyecto y acabó pasando de una simple casa rústica (para lo que le habría alcanzado el dinero), a un intento de mansión. Al haber resultado ganador de la lotería, los bancos no se opusieron a la concesión de créditos, pero en menos de un año, Norbert estaba totalmente endeudado.
Fue entonces cuando concibió un plan para poder pagar sus deudas: atracar pequeñas sucursales bancarias. El día 03 de mayo de 1984 acudió al aparcamiento de una estación depuradora de aguas. Allí encontró a un viajante de 47 años de edad llamado Siegfried Pfitzer, que se encontraba descansando tras un largo viaje en el aparcamiento. Norbert le disparó con su arma reglamentaria y se llevó el auto para ir a una sucursal del Volksbank de la localidad de Marbach.
Al llegar al banco, rompió la ventanilla de la caja con un martillo y exigió que le diesen dinero, llevándose casi 5 mil marcos. El hecho de haber roto la ventanilla con un martillo (y el hacerlo en las siguientes ocasiones) fue lo que sirvió para que la prensa lo apodase “El Asesino del Martillo”, aunque nunca utilizó esta herramienta para agredir a nadie.
El 21 de diciembre de ese mismo año asesinó, de igual manera, a un hombre británico que se encontraba de vacaciones, Eugene Wethey. De forma idéntica que en el anterior caso, le disparó con su arma reglamentaria y se llevó el vehículo. Una semana más tarde, atracó otra sucursal del Volksbank, situada en Cleebronn, una pequeña localidad de poco más de 2 mil habitantes en Baden-Württemberg, al sur de Alemania. En esta ocasión su botín fue de 79 mil marcos.
Al notar las similitudes entre ambos casos, la policía alemana inició un dispositivo sin precedentes: más de mil sospechosos fueron interrogados. El 22 de julio de 1985 Norberth asesinó al electricista Wilfried Schneider, un joven de 27 años y se apoderó de su carro para atracar el Raiffeisenbank que había en la pequeña localidad de Spiegelberg, sin embargo, la presencia policial en las cercanías lo obligó a huir.
El 27 de septiembre se produjo un nuevo atraco a un banco. En esta ocasión el atracador logró 11 mil marcos y huyó en el carro de un empleado del banco, pero esta vez no realizó ningún disparo. Las posteriores descripciones de los testigos, arrojaron como resultado un retrato robot de gran similitud con Norbert Poehlke.
Inicio del fin
Los investigadores encargaron un estudio de balística y compararon los resultados con el arma de Norbert en un momento en que no estaba de servicio. Los resultados no podían ser más claros: el arma empleada en los asesinatos era, sin lugar a dudas, la pistola de Norbert Poehlke. También, en un golpe de suerte, la policía encontró el uniforme de Norbert en una taquilla de la estación de tren mientras comprobaban un aviso de bomba.
Cuando fue interrogado sobre esto, Norbert Poehlke dijo que tenía allí el uniforme porque había ido a un entierro de un familiar, por lo que se había cambiado antes de tomar el tren y había dejado allí su uniforme para recogerlo a la vuelta. Como parecía una coartada sólida, lo dejaron ir.
Sin embargo, cuando la policía comprobó la veracidad de estos hechos, notaron que no había muerto ningún familiar del sargento desde hacía dos años, por lo que se enviaron dos patrullas a su casa a detenerlo. Cuando llegaron allí, nadie abrió la puerta, así que un juez autorizó la entrada en la casa, en donde se descubrió a la mujer de Norbert Poehlke, Ingeborg, muerta en el salón con dos disparos en la cabeza y a su hijo Adrián en una habitación, igualmente, asesinado a tiros.
El 23 de octubre de 1985 Norbert Poehlke fue encontrado muerto en su vehículo en las cercanías de la localidad de Canno Torre, adyacente a la localidad italiana de Brindisi. Con él estaba su otro hijo, Gabriel. Primero le había disparado al pequeño y luego se había suicidado con la misma pistola.
Era policía
Tras el asesinato del electricista Wilfried Schneider, de 27 años de edad, la presión mediática para que los cuerpos de seguridad capturaran al homicida comenzó a ser enorme, e incluso se empezó a presumir que la posible identidad del autor podría ser la de un policía. No estaban equivocados: Norbert Poehlke era policía
Edda Pujadas /Twitter: @epujadas