Giosel Ramírez, de 26 años de edad, exfuncionario de la Policía Metropolitana que se ganaba la vida como escolta, fue asesinado este sabado a lad 9:00 p.m, en la calle Colombia de Catia.
El joven fue a llevarle unas hallacas a un amigo, pero justo en el momento en que estacionó la moto KRL 650 frente a la casa fue sorprendido por delincuentes. Aunque les entregó su arma de fuego y el vehículo le dieron efectuaron tres disparos.
El escolta fue trasladado hasta el Periférico de Catia pero murió. La versión de testigos de la zona indica que los homicidas habían pasado 10 minutos antes de asesinarlo, le vieron la pistola y luego volvieron.
En otro hecho de sangre ocurrido en El Observatorio, parroquia 23 de Enero, fue asesinado Yonbraiker Rosas Paredes (35), mototaxista que laboraba en la línea de La Silsa.
Ocurrió a la 1:00 de la tarde del sábado, cuando el mototaxista fue a llevar a su pareja que tiene cinco meses de embarazo a casa de su suegra que vive frente al colegio Pimentel.
Antes de llegar tres sujetos los interceptaron, le exigieron a la mujer que se bajara de la moto y a él que entregará la Suzuki DR 650. El mototaxista se negó y le dispararon. Murió en el sitio.
Su madre Teresa Paredes, relató que de sus cinco hijos ha perdido tres por la violencia. Hace tres años mataron a Anyer Alexander por ese mismo sector para robarlo y hace ocho años mataron a Manuel Rosa Paredes. El había discutido con un sujeto y le disparó.
AA