A pesar de que sus orígenes aún son tema de debate dentro de algunos círculos científicos lo cierto es que se trata de uno de los inventos más revolucionarios del hombre y gracias a él hemos podido entender mejor nuestro mundo y el universo que nos rodea
El incansable anhelo por conocer hasta los más lejanos rincones de nuestro universo fue desde tiempos ancestrales una de las más grandes añoranzas de la raza humana, es por eso que nuestro invento destacado de hoy es uno de los aparatos que más ha colaborado con el avance de la ciencia moderna, hablamos por supuesto de el telescopio.
La palabra Telescopio está formada por a partir de raíces griegas y significa “aparato para ver de lejos”.
A pesar de que los orígenes de su paternidad aún son bastantes discutidos lo cierto es que se trata de un invento que revolucionó la ciencia desde tiempo remotos pues hasta finales del siglo XV el conocimiento astronómico de la humanidad estaba basado en mediciones y conceptos básicos nacidos de observaciones hechas a través de la simple vista del hombres.
El telescopio como lo conocemos hoy en día es una herramienta basada en dos lentes de curvaturas desiguales que permiten al ojo potencializar considerablemente el poder de la percepción humana a distancia y es el principal responsable del descubrimiento y posterior estudio de la gran mayoría de los fenómenos cósmicos que tienen lugar dentro del universo que nos rodea.
Orígenes turbios
A pesar de que muchos atribuyen a Galileo la invención del telescopio en el año 1609, las investigaciones más recientes aseguran que aquel modelo presentado en sociedad por el famoso astrólogo fue construido a base de una serie de documentos y planos desarrollados a fines de 1590 por el fabricante de lentes alemán Hans Lippershey, siendo él la primera persona que solicitara una patente para el aparato en 1608.
Se conoce que pocas semanas después un holandés identificado bajo en nombre de Zacharías Janssen, quien es reconocido oficialmente como el inventor del microscopio, intentó patentar el mismo aparato.
Sin embargo, una investigación realizada en 2008 arrojó que ni alemanes ni holandeses eran los fabricantes originales de aquel prototipo y los créditos correspondían a un español, Juan Roget, quien ya para 1590 poseía un modelo que funcionaba a la perfección.
Hoy en día los telescopios modernos podrán superan a sus antepasados en cuanto a tamaños y formas pero todos se basan en los mismos conceptos originales e incluso son fabricados con los mismos materiales desde su invención: lentes de cristales de cuarzo 100% transparentes y de rubí.
Mejoras técnicas
Desde su invención el intento por parte de la ciencia para perfeccionar el telescopio ha sido incesante, muchos han creado sus propios modelos para resolver problemas como la aberración cromática de los primeros modelos, así como los problemas de visualización y asimetría de los mismos.
Es de esta manera, y después de innumerables intentos como en 1930 se comienzan a fabricar los primeros prototipos de aluminio, material que se utiliza en la actualidad.
Los mismos astrónomos modernos coinciden en que hoy por hoy existen infinitas variedades de telescopios cuyas formas y tamaños dependerán de para qué se los necesite pues aseguran que no existe un telescopio adecuado para cualquier tipo de observación del cielo.
El más grande del mundo
El norte de Chile fue el lugar escogido por el Observatorio Europeo Austral (ESO, por sus siglas en ingles) para la instalación de el que será el telescopio más grande del mundo.
El E-ELT será construido sobre el cerro Armazones en pleno desierto de Atacama y se prevé que su espejo primario mida alrededor de 42 metros de diámetro.
Según información oficial este centro de observación que pretende revolucionar la visión que tenemos de nuestro universo comenzará a funcionar a partir de 2018.
De acuerdo a los informantes, Chile fue escogido para la instalación del E-ELT gracias a la calidad astronómica de su atmosfera y su estabilidad pues los estudios arrojan que el país cuenta con más de 320 noches al año de cielos claros.
Tim Zeeuw, director general del proyecto, declaró en 2010 “este es un importante hito que nos permitirá definir el diseño final de este ambicioso proyecto, que permitirá enormes avances en astronomía”.
Especialistas aseguran que los 3 mil 60 metros sobre el nivel del mar al que se encuentra la localidad de Armazones se impusieron sobre los demás países aspirantes entre los que se encontraba la isla canaria de La Palma.
Por: Zuleth Araque / zaraque@diariolaregion.net