Telégrafo: año 1844 acortó distancias en la comunicación humana

telegrafo

En 1856 fue tendida la primera línea de Comunicación entre Caracas y La Guaira por órdenes del Presidente José Tadeo Monagas

Tras múltiples experimentos del hombre por lograr acortar las comunicaciones a larga distancia, iniciadas en el año 1746 por el científico y religioso francés Jean Antoine Nollet, y luego de que muchos científicos de diferentes países fueron utilizando materiales alámbricos demostrando que la fuerte carga de electricidad podría generar comunicación a largas distancias, fue un día en 1836 cuando al pintor estadounidense Samuel Morse, que venía de regreso a su país desde el continente europeo al escuchar casualmente una conversación entre pasajeros del barco sobre electromagnetismo, se le ocurrió la invención del Telégrafo o el mejoramiento de la invención realizada por Claude Chappe en 1794, como aseguran algunos historiadores.

Luego de muchos estudios, por parte de Morse, que lo hicieron abandonar su profesión de pintor, fue en el año 1840 cuando Morse patentó su telégrafo eléctrico, pero sin duda alguna fue el 24 de mayo de 1844 cuando Morse demostró con hechos que el telégrafo logró acortar las distancias de la comunicación humana, transmitiendo por primera vez por línea alámbrica tendida desde Washington a Baltimore el siguiente mensaje: “¿Qué ha forjado Dios?”, recibido por su asistente Alfred Vail. El sistema de Morse producía una copia de papel con puntos y rayas, las cuales eran luego traducidas por un operador.

A partir de esa frase del párrafo de la Biblia 23:23 el sistema de comunicaciones ideado por el hombre comenzó a acercarse más y más a los pueblos del mundo, relegando progresivamente los medios arcaicos de la comunicación humana y el telégrafo eléctrico quiso ser adoptado e inventado en todos los países que anhelaban evolucionar su comunicación, desplazando así las comunicaciones arcaicas que podían durar hasta meses para hacerse efectivas, como eran los mensajeros, las hogueras, palomas tambores y banderas colocadas en las cumbres de cerros y colinas.

Gracias a Morse y después a Lesage, Ampere, Persted, Hertz, Marconi y otros pioneros, los mensajes viajan hoy a velocidades increíbles atravesando montañas y desiertos y cruzando la inmensidad de los océanos.

14 años después del primer mensaje

14 años después del primer mensaje, un Congreso reunido en París premió a Morse con 400 mil francos, pero dos años antes de que fuese premiado y aclamado, ya en Venezuela había sido contratado el tendido de una línea, el 29 de mayo de 1856 entre Caracas y La Guaira, por orden del Presidente José Tadeo Monagas, quien encomendó el tendido de la línea al ingeniero español Don Manuel de Montúfar y los primeros operarios fueron los norteamericanos H. Benton, para la estación de Caracas y Henry Gary para La Guaira.

Las líneas telegráficas por toda Venezuela comenzaron a extenderse desde la época de Guzmán Blanco, quién decretó la oficialización del servicio como factor de progreso y durante la presidencia de Cipriano Castro se manifestaron las primeras luchas reivindicativas que logran su primer fruto con la constitución de la Caja de Ahorros para la Sociedad de Telegrafistas y la edición de una revista gremial para la culturización de los operarios. El día de los Telegrafistas fue consagrado por decreto del doctor Leonardo Ruiz Pineda siendo Ministro de Comunicaciones.

Puntos y rayas se apoderan

La gestación de este sistema de comunicación se debe a la figura de Samuel Findley Breese Morse, quién dirigió sus esfuerzos a las investigaciones de los fenómenos electromagnéticos y al establecimiento del código al que se daría su nombre.

Antes de la muerte de Morse, ocurrida en Nueva York el 2 de abril de 1872, el sistema que había creado se había generalizado como código americano. En 1851, una comisión de los estados europeos introdujo una serie de innovaciones destinadas a simplificar algunas de las signaturas del código, con lo que surgió el llamado Código Morse Internacional o Continental.

Actualidad

Hoy en día la comunicación va evolucionando cada día más y gracias a la invención del telégrafo se pueden enviar de manera simultánea muchos telegramas y mensajes, siendo el origen de todos los procesos de información, que con el paso de los años ha traspasado fronteras y generaciones, derivando múltiples equipos electrónicos que acercan y alejan cada vez más a las personas, dependiendo del cristal, con que se mire, pues acerca las largas distancias y acorta o disminuye las cortas distancias.

Por: Karla Tovar / ktovar@diariolaregión.net

Salir de la versión móvil