Hay quienes creen tan fervientemente en la mala suerte de un viernes 13 que no les gusta ni salir de su casa, hay otros que se hacen llamar escépticos y sin embargo cualquier altercado durante este día se lo adjudican inmediatamente a la fecha.
Cualquiera que se a el caso es válido, ésta sin duda es una fecha muy publicitada –sobre todo por el cine- pero si hacemos un recorrido histórico sobre algunos viernes 13, veremos que esta superstición no es tan injustificada.
En el cristianismo las personas lo relacionan con le hecho de que Jesús haya muerto un día viernes y que la última cena haya sido integrada por 13 personas, esto estuvo más extendido en Europa.
La leyenda del viernes 13 comenzó a crecer durante la edad media cuando un viernes 13 del año 1307 el rey Felipe IV de Francia ordenó el arresto de Jacques DeMolay, un líder de los antiguos caballeros templarios. Inicialmente Jacques fue a ver al rey Felipe con la intención de establecer un diálogo pero al contrario de ellos recibió junto a sus soldados crueles torturas para obtener información, muchos de los templarios fueron asesinados.
Jacques DeMolay también fue ejecutado pero antes de morir pronunció una maldición, dijo que el Papa y el propio rey Felipe morirían antes de cumplirse un año, dicha maldición se cumplió y ambos murieron ese mismo año desde entonces los seguidores de los caballeros templarios proclamaron el viernes 13 como un día maldito.
Otras creencias paganas atribuyen el viernes 13 a la leyenda de origen nórdico sobre la muerte de Balder, se dice que en medio de una cena entre dioses nórdicos el dios de la mentira “Loki” asistió a dicha cena sin que nadie lo hubiera invitado así completó el número de comensales a 13. En medio de la cena consiguió persuadir al hermano de Balder, Hod quien incitado por Loki le lanzó un muérdago a Balder que le cayó justo en el pecho.
El numero 13 y su mala suerte
Dicho incidente terminó n la muerte de Balder quien era el dios de la luz, la alegría y reconciliación, de dicha leyenda nació otro mito que indica que si 13 personas se sientan en una mesa a cenar una de ellas morirá.
En la tradición de los Wiccan, el número 13 es el elegido para formar una especie de círculo sumado a las antiguas tradiciones nórdicas.
El 13 irónicamente es un número de buena suerte en Italia conocida por muchos por ser la sede del Vaticano, los conflictos entre la iglesia católica y la política y campos como la teología hacen evidente que el catolicismo busca desacreditar dicha fecha calificándola como un día satánico.