La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) llamó este miércoles al diálogo al gobierno y a la oposición después de la reelección del presidente Hugo Chávez para el mandato 2013-2019.
La CEV emitió una declaración en la que destacó la participación cívica de los electores en los comicios del domingo e invitó a los ganadores y perdedores a acordarse para vivir en «concordia, solidaridad y paz».
«Felicitamos al pueblo venezolano por la actitud respetuosa y ordenada, pacífica y ejemplar, demostrada en la jornada electoral del 7 de octubre, que contó con una afluencia sin precedentes de votantes, lo que pone de relieve la voluntad de nuestro pueblo de participar de manera activa y protagónica en los procesos que determinan el destino del país», indicó el comunicado de los obispos católicos firmado por el presidente de la CEV, Diego Padrón.
Agregó que el pronto acatamiento de los resultados oficiales debe contribuir a disipar definitivamente las «dudas sobre posibles planes anticonstitucionales y amenazas de desestabilización en nuestro panorama político».
«En adelante, nadie debería recurrir a esos argumentos sin experticias y fundadas razones», recalcó.
Chávez ganó su cuarta elección presidencial desde 1998 con el 54,85 por ciento de los votos, contra el 44,52 de su rival Henrique Capriles Radonski, lo que confirmó la polarización de la sociedad entre partidarios y opositores del mandatario bolivariano, quien enarboló la bandera del socialismo.
El presidente afirmó que estaba dispuesto a un acercamiento, pero dejó claro a la oposición que descataba un eventual «diálogo de élites».
«Tanto quienes han logrado el triunfo electoral como quienes no lo han hecho, están invitados a reflexionar sobre las consecuencias y responsabilidades que esto lleva consigo, pensando siempre en Venezuela. El respeto a la Constitución y las leyes, la defensa de los derechos de las personas, particularmente de los más pobres y necesitados, la promoción del bien común, un proyecto de país marcado por la inclusión, deben estar en la agenda de todos», señaló a la CEV.
Asimismo, destacó que la existencia de dos visiones de país, puesta en evidencia en los resultados electorales, es un «hecho que debe ser tenido en cuenta en función de la construcción del país, a fin de que podamos vivir en concordia, solidaridad y paz».
«El diálogo y la reconciliación entre los venezolanos es un desafío y una tarea permanente de nuestra sociedad, más allá de la coyuntura electoral. Cada día es una oportunidad para reconciliarnos, en la familia, entre los vecinos, en el trabajo, entre los actores políticos, y en el afán por lograr el respeto y el entendimiento mutuos, que desemboque en bien de la colectividad», añadió.
Los obispos dijeron que después de los comicios instaban a los venezolanos a tomar actitudes positivas que «nos llevarán a superar las fracturas sociales y políticas».
Destacaron que la CEV está comprometida «evangélicamente a ser instrumento de paz».