La joven monja que se convirtió en sensación de internet tras cantar en la versión italiana de “The Voice”, se impuso este jueves en la final del concurso de talentos.
Vestida de hábito y con un crucifijo colgado en el cuello, Sor Cristina Scuccia agradeció a Dios por su victoria.
“Estar aquí no depende de mí, todo es gracias al hombre que está allá arriba”, dijo tras conocer el veredicto.