El Tribunal 3 de Control de la ciudad de Valencia, ordenó la detención de Lorent Gómez Saleh y Gabriel Valles, expulsados de Colombia la semana pasada y que permanecerán recluidos en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), ubicada en Caracas.
Gómez Saleh y Valles fueron puestos a orden de las autoridades venezolanas tras ser expulsados de Colombia por hacer proselitismo en ese país, actividades prohibidas por las normas migratorias.
Los jóvenes activistas tenían en el país órdenes de captura emitidas por un tribunal de control por la violación del régimen de presentación al que estaban sometidos por su supuesta participación en una manifestación en 2010.
En ese año, los opositores fueron aprehendidos «cuando participaban en manifestaciones violentas (…), procedimiento durante el cual también se les incautó material bélico», informó el Ministerio Público.
Los fiscales ratificaron el lunes las imputaciones «por la presunta comisión de los delitos de instigación e intimidación al orden público, incertidumbre pública y divulgación de información falsa por parte», añade el texto del MP.
La madre de Gómez Saleh, Yamile Saleh, responsabilizó esta semana al presidente colombiano, Juan Manuel Santos, por lo que pueda pasarle a su hijo.
«Él (Santos) es el culpable porque lo hizo aún sabiendo las amenazas públicas en contra de mi hijo, que está en riesgo su vida. Si querían deportarlo podían hacerlo a otro país, más si es un defensor de los derechos humanos», dijo.