Un grupo defensor de los derechos civiles entabló el martes en Michigan una demanda en representación de poseedores de un permiso de residencia y trabajo en Estados Unidos —conocido como tarjeta verde_, en la cual se oponen al decreto del presidente Donald Trump que suspende temporalmente el ingreso de refugiados y prohíbe la entrada al país a ciudadanos de siete naciones predominantemente musulmanas.
La Liga Árabe-Estadounidense de Derechos Humanos argumenta en la querella presentada en el tribunal Federal de Distrito de Detroit que la acción ejecutiva es inconstitucional y tiene como blanco a las comunidades de inmigrantes. La demanda representa a media decena de residentes permanentes, algunos de los cuales han sido sacados de vuelos con destino a Estados Unidos.
Rula Aoun, director de la liga, señaló que la mayoría de los demandantes viven en el área de Detroit, la cual tiene una de las comunidades árabes y musulmanas más grandes de la nación.
Aoun agregó que los poseedores de la tarjeta verde tienen «derecho jurídico de estar en Estados Unidos» pero han sido detenidos o se les ha negado la entrada.
Trump dice que el veto es por seguridad, no por religión. Su decreto enfrenta varias impugnaciones jurídicas.
AP